LAS CONFERENCIAS TEMÁTICAS: Capitalismo de información y emergencia de una sociedad cívica planetaria
 

 

Introducción

De hoy en adelante el capitalismo informacional y financiero tiene que enfrentar un desafio capital : la emergencia de una sociedad cívica(y no sólo civil ) ahí mismo donde había edificado su poder frente a los estados y al movimiento sindical, es decir en el espacio mundial . El hecho es tanto más marcante cuanto tal emergencia se debe en gran medida al uso de uno de los vectores míticos de la nueva modernidad: la "Internet". Las manifestaciones de Seattle desempeñaron un papel analizador (en el sentido del análisis institucional) de un movimiento profundo que los grandes medios de comunicación habían desconocido hasta la fecha . Sin embargo esta emergencia es frágil todavía , no solamente por el considerable desequilibrio entre las fuerzas participantes (en particular desde el punto de vista financiero),sino también porque la tentación defensiva vuelta hacia el pasado todavía es fuerte entre los movimientos contestatarios. Por lo tanto es importante comprender la naturaleza del capitalismo de información, identificar sus fuerzas y sus puntos flacos para mejorar el desarrollo de una estrategia dinámica capaz de construir una verdadera "civilidad mundial".

Comprender el capitalismo de información

Comprender el capitalismo informacional requiere desde el comienzo entender la especificidad de la mutación informacional, que no se reduce a una variante de las revoluciones industriales,fuere la tercera. En efecto dos características mayores hacen del ingreso en la era de información una mutación totalmente aparte. La primera se basa en el paso de una era centrada en la energía a un nuevo período histórico marcado por la información que fue analizado varias veces en las columnas de "Transversales de Science/Culture", particularmente por J.Robin y R.Passet.

La segunda característica consiste en que esta "información", que en el sentido informático del término no tiene sentido pues no es sino un flujo de señales numéricas ,le ortogará a la inteligencia humana un lugar privilegiado en el proceso de producción y reorganización de las relaciones sociales. Por lo cual son todas las informaciones dotadas de significado (escritura,lenguaje,memoria etc...) las que se vuelven determinantes.Las revoluciones agrícolas e industriales, porque se organizan principalmente en torno a la relación materia/energía, reducían la inteligencia a una mera función de adaptación a las nuevas técnicas y/o máquinas. Pero ahora domina la parte" software ",la materia gris , cuyo papel es más decisivo que la componente "hadware " del ordenador.

Esta primera distinción nos permite comprender que si el capitalismo de información utiliza plenamente el potencial tecnológico de la información numérica, en contrapartida subutiliza seriamente la formidable fecundidad de la inteligencia humana, debido a que su lógica es perpetuar la dominación y la instrumentalización del ser humano. En este sentido es como se puede decir que si hoy estamos metidos en plena revolucion de la información la propia "revolución de la inteligencia" queda por hacer en lo esencial . Y no se hará gracias al capitalismo, aunque fuera informacional. Al contrario de lo que erroneamente llamamos "inteligencia artificial", la inteligencia humana no funciona sin deseo,empezando por el deseo de curiosidad que pone en marcha nuestra voluntad en comprender y conocer lo desconocido.. Según esté deseo positivamente dirigido hacia la creatividad o de forma negativa hacia la inhibición (la angustia), la inteligencia humana -individual pero también colectiva- va a utilizar o esterilizar el formidable potencial que nos ofrecen nuestras centenas de mil millones de neuronios. Es aquí donde el capitalismo encuentra sus mayores dificultades pues reserva el derecho de creatividad a una minoría de individuos reduciéndola a su expresión mercantil.

No basta con proponer una postura anticapitalista para garantizar una mejor creatividad. Los malogros del socialismo de estado y en primer lugar del sistema comunista lo han demostrado ampliamente. Pues el capitalismo puede al menos apelar a dos recursos mayores: sabe darle un gran espacio al deseo y a la imaginacion, por un lado, y por otro a los procesos de autoregulación del mercado.Sin duda este deseo, ya se ha visto, está singularmente limitado puesto que se arraiga en una lógica de profunda desigualdad; lo imaginativo se limita a la pasión por la riqueza , y la capacidad de autoregulación -que constituye la fuerza del mercado- está en sí misma limitada por la lógica del poder que conduce a concentraciones cada vez mayores. Pero si nos contentamos con oponerle -como lo hacen a menudo las corrientes que lo confrontan- la virtud y la razón por un lado, la referencia a una simple economía de necesidades básicas por otro y la organización burocrática de la producción de propina entonces el capitalismo se gana la batalla. Por muy injusto que sea resiste mucho mejor a la entropía, es decir a la degeneración de los sistemas burocráticos -incluso los totalitarios- que se le oponen, por estar más cerca de la naturaleza psíquica humana (ser de deseos y de angustias y no solo de necesidades y de razón) que la mayor parte de las utopías que no toman en cuenta esta mezcla a la vez sexual, moral y psicológica de la humanidad.

En cambio si unas fuerzas alternativas saben aliar lo mejor de la racionalidad y la fuerza del deseo y de lo imaginario; si hacen de la reglamentación una regla del juego al servicio de fuertes procesos de autogestión, de subsidiariedad y de decentralización, en vez de establecer burocracias que aniquilan las energías, entonces se hallan en buena posición para pasar de la guerra de trincheras a la guerra de movimientos, para reunir lo mejor de la lógica de resistencia a lo mejor de la lógica de anticipación.Y es dentro de esta perspectiva dinámica y ofensiva como podrán utilizar en su beneficio cuatro características del capitalismo informacional que de puntos fuertes se vuelven zonas frágiles : la desmaterialización, el consumismo, la imagen y la propia globalización.

Fuerzas y flaquezas de la desmaterialización

La fluidez, la rapidez son las características claves de la mutación informacional que el capitalismo sabe usar a su favor particularmente en las operaciones financieras para ganar por velocidad estados, bancos centrales y controles de todo tipo .Además la desmaterialización facilita la aparición de otra cualidad que a menudo nos confunde: la virtualidad. La virtualidad no es realidad inmaterial, es un estado potencial que puede materializarse dentro de ciertas condiciones. Un sitio Internet por ejemplo, no es un " sitio " virtual: es bien real, aunque sea inmaterial. A diferencia de gran parte de las operaciones financieras que sí son virtuales, es decir que expresan una anticipación de posible riqueza que no se realizará hasta la venta de los títulos poseídos. Esto significa que la virtualidad, que se diferencia de lo real o irreal , tiene como apoyo mayor la confianza y el deseo. Se confía en la capacidad del proceso de tranformación en realidad de lo que sólo era potencialidad .Se confía también en los que participan de la misma actitud (en el sentido etimológico del término: una fé, una creencia compartida...) . En cuanto al deseo, es precisamente la energía la que transforma la información virtual en realidad. Bien se ve que las ventajas(de fluidez y rapidez) que trae la desmaterialización, junto con la formidable dinámica que proporciona el uso sistemático de la virtualidad ,permiten avanzar mucho más sobre sus adversarios y competidores a quienes saben utilizarla .En contrapartida ,también pueden generar sus efectos contraproducentes, que pueden llegar a ser temibles .Así que la desmaterialización ,es una evidencia ,pero digna de reflexión ,no tiene la solidez ,la durabilidad ni el arraigamiento que caracterizan la materia .De la inmaterialidad a la desintegración de los objetos, de los seres, de la sociedad, no hay más que un paso. Los humanos por tener una estructura psicológica mixta sienten una necesidad básica de tierra, territorio y referencias puesto que existen en un universo inmaterial.
La virtualidad , porque funciona con confianza y deseo ,está en si misma sujeta a todos los males de la desconfianza y de la angustia . En un abrir y cerrar de ojos la euforia puede dar lugar al pánico y los mercados bursátiles son el espacio privilegiado de esa revirada que evoca espantosamente los efectos de las drogas o de esa enfermedad del siglo llamada psicosis maníaco-depresiva, característica precisamente de las fases de exitación y depresión que imposibilitan encontrar un punto de equilibrio. Es por lo que el capitalismo informacional se vuelve cada vez más incapaz de enfrentar la demanda de raíces tanto territoriales como simbólicas. Por ello genera cada vez más integrismos relacionados con la tierra, el territorio(sea al nivel local, regional o nacional) o con el significado (sectas, fundamentalismos religosos etc...) Los movimientos civiles y sociales capaces de responder a esta demanda pero de forma abierta y a diferencia de las ideologías que se fundan en la identidad , por ejemplo articulando la demanda de ciudadanía nacional con las de ciudadanía local, europea o mundial, o desarrollando un planteamiento laico que tome en cuenta la cuestion del sentido , cuentan con una capacidad mucho mejor de respuesta que el duo esquisofrénico capitalismo-integrismo.

El envite consumista

El capitalismo informacional , puede prescindir cada vez más de productores (de allí los dramas sociales que genera en lo que se refiere al paro de masa.En cambio no puede prescindir de consumidores. Una campaña clásica del tipo "sindical/nacional" está en falso porque este tipo de capitalismo puede contraatacar a otro nivel territorial , (al nivel internacional ) ,y soportar facilmente los conflictos en la esfera de la producción. En contrapartida es mucho más vulnerable en cuanto un movimiento consumista se organiza en su contra y pasa de la simple presión sobre los precios a la cuestión más radical de la calidad: calidad de la alimentación por ejemplo, que desemboca en la exigencia global de cualidad de vida. Así el consumismo se vuelve cívico y plantea también el problema de la índole de la democracia ; esto es precisamente lo que pasó con las campañas cívicas lanzadas por la Confederación Campesina contra la mala comida. El retroceso de Monsanto, la "Microsoft de la biotecnología" ,obligado a retirar del mercado la semilla llamada "Terminator" (por no ser reutilizable por los agricultores, condenados a comprarla a la multinacional año tras año), es una demostración del nuevo poder de las campañas cívicas. En efecto fue a raiz del movimiento de opinión en contra de la comida mala y los riesgos acarreados por los OGM (organismos genéticamente modificados) cuando cayó el valor de las acciones bursátiles de Monsanto , lo cual obligó la firma a efectuar este retroceso simbólico. Encontramos aquí al mismo tiempo el tercer signo de fragilidad, si los participantes de la protesta saben usarla adecuadamente: la imagen.

El papel cada vez más importante de la imagen y de lo imaginario

Debido a que la imagen linda por un lado con lo real inmaterial y por otro con la virtualidad ,su papel va aumentando dentro de la mutación informacional, y su instrumentación por el capitalismo se hace cada vez más nítida. Desempeña en particular un papel capital dentro de la especulación financiera ya que esta esfera se compone esencialmente de capitales virtuales que resultan ser anticipaciones sobre el porvenir de las empresas cotizadas. Es así como se puede asistir a esa paradoja permanente de sociedades que en realidad están perdiendo pero que se benefician de valores bursatiles considerables - hasta decenas de veces su importe operacional. Pero cuando la imagen de dichas sociedades se deteriora como en el caso de Coca Cola o más recientemente de Monsanto debido a las campañas cívicas sobre los OGM y la calidad de la alimentación, obervamos que la Bolsa se asusta, que los valores bursátiles se hunden. El valor , debe decirse, no es la virtud principal de los operadores financieros! Esa es la razón por la que la piratería por saturación informática de los sitios más destacados en la Internet, florón de la "nueva economía" que nos machaca los oidos , es menos peligrosa en su forma técnica (un bloqueo de algunas horas) que por la demostración de fragilidad que lleva a cabo y por la deterioración de la imagen que transmite.

El capitalismo en la trampa de la globalización

La cuarta zona de debilidad del capitalismo informacional, por muy paradójica que pueda parecer, es la globalización misma. Pues ella ,por ser lo que es, plantea problemas de regulación que el capitalismo no quiere o no puede resolver. Se ve claramente en las cuestiones ecológicas, como la extracción de gas, los riesgos con la energía nuclear que no se circunscriben a las fronteras (véase Chernobil); se ve también en lo referente a la organización jurídica de un derecho penal (y ya no sólo comercial) internacional (tribunal para Ruanda y la ex- Yugoslavia; proyecto de una Corte Penal Internacional...)Se nota incluso en el espacio financiero donde la idea de una regulación se abre camino porque ya nadie puede seguir ignorando los riesgos que el volcán financiero sobre el que vivimos hace correr a la economía mundial. Sería tan larga la lista de reglamentos ineludibles que se presentarán en el siglo XXI que el futuro problema consistirá menos en saber si habrá o no regulación internacional, que en debatir su naturaleza democrática o nó. De hecho los protagonistas -intelectuales, políticos, económicos- que dieron origen a la revolución conservadora anglosajona jamás jugaron el juego mundial. En cambio han utilizado la globalización contra los estados del bienestar y los movimientos sindicales encerrados en el espacio de las naciones. Pero llega la hora en que se ven presos en su propia trampa: por razones económicas como dijimos, pero también y más aún por razones humanas y sociales: no puede haber ningún tipo de globalización con futuro dentro de un "apartheid" social y económico global cuando la fortuna de las 358 personas más ricas del mundo se iguala al ingreso de los 2.300.000.000 (dos mil trecientos millones) habitantes más pobres del planeta. Pues, si a semejanza de lo sucedido con las ONG, el movimiento sindical, las fuerzas cívicas y políticas son capaces de encontrar la manera de pensar y actuar en en el escenario mundial, así como empiezan a crear las condiciones necesarias para existir en un ámbito europeo, entonces la globalización se podrá convertir en un tema progresista y reconciliarse en lo esencial con los valores históricos del internacionalismo.

El ejemplo de ATTAC

La historia de Attac es especialmente fecunda en ese sentido.Cuando las ONG y los sindicatos aparentemente y casi siempre pertenecen a mundos que se ignoran , Attac inventa una ONG en la cual el componente sindical es esencial. Cuando el debate francés se ha convertido en un conflicto entre neoliberales y nacionalistas (defensores de la soberanía), Attac se desarrolla en una base mundial preservando claramente sus raíces francesas. Cuando la crítica del capitalismo se funda las más veces en una mera protesta, Attac articula esta resistencia con una lógica de anticipación y de propuesta manifiestas en su lema : "Otro mundo es posible". Es por lo que estas nuevas formas de acción cívica concurren más allá del surgimiento necesario y útil de una sociedad "civil" planetaria, a la formación de una sociedad política democrática a escala mundial. La organización en una red, la utilización de tecnologías de información y especialmente del correo electrónico y de la Internet, la capacidad de desenvolver una nueva forma de militancia más lúdica, una capacidad verdadera de apreciación, son los puntos que se destacan de estas nuevas formas de acción social y ciudadana. José Bové hizo mucho evidentemente por popularizar el surgimiento de este nuevo actor en la escena mundial, pero él es el primero en explicar que se trata de un movimiento colectivo arraigado en una reflexión y acción transformadora, largamente madurada en el curso de los diez últimos años. Las redes como las conferencias interciudadanas europeas, iniciativas como las de Icaro en Francia (de ciudadanos activos en la red) que organizan en Marsella con Adeles el quinto encuentro de la democracia local, entre muchos otros, muestra hasta qué punto Attec se apunta en un amplio movimiento que hará de la ciudadanía mundial una de las grandes aventuras del Siglo XXI.

Patrick Viveret, Director de la Redacción de "Transversales Science/Culture"

 




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