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Más de un millar de personas, de diferentes edades y condiciones, mantienen en uso los huertos urbanos, sociales y ecológicos puestos en marcha por la Consejería de Fomento y Vivienda a través de AVRA en las ciudades de Sevilla, Granada y Algeciras, iniciativa con la que se ha conseguido revitalizar 15.700 metros cuadrados de suelos urbanos en desuso. Al convertir estos suelos en productivos se consigue poner al servicio de la ciudadanía un espacio público destinado al encuentro, la convivencia y el aprendizaje colectivo de la agricultura ecológica. El objetivo de estos huertos es el cultivo de alimentos sanos, respetando la naturaleza y promoviendo al mismo tiempo el conocimiento del entorno.

 

Las tareas en la zona para la limitación de parcelas y preparación de la tierra son asumidas por la Junta de Andalucía, que además, diseña los caminos y senderos y dota de instalaciones para el suministro de agua de riego.

 

La actividad en los huertos urbanos ya se encuentra a pleno rendimiento en el parque del Alamillo, en Sevilla, en la barriada granadina de Almanjáyar y en La Piñera, en el municipio gaditano de Algeciras.

 

 

Los huertos del sevillano parque del Alamillo son los más antiguos y consolidados, y también los que más superficie ocupan, los que más actividad generan y los que más hortelanos agrupan: actualmente más de 600 personas, cifra que se incrementará con las 41 nuevas parcelas.

 

Los huertos del Alamillo se pusieron en marcha a finales de 2013, desarrollándose sobre una hectárea de naranjales en desuso en lo que históricamente han sido suelos agrícolas enriquecidos por las crecidas del Guadalquivir en la Isla de la Cartuja y calificados como espacios libres en la ordenación urbana.

 

Teniendo como referentes los huertos sociales desarrollados a principios de los años 90 en el Parque Miraflores de Sevilla, en el Alamillo se ofertaron en una primera convocatoria 139 parcelas, que están siendo cultivadas por colectivos y grupos de particulares que participan en esta iniciativa y que suman alrededor de 600 personas, organizadas en 116 grupos de entre 3 y 10 familiares o amigos, además de 21 grupos ligados a asociaciones, centros formativos o fundaciones. Las superficies oscilan entre los de 35 y 70 metros cuadrados.

 

A la vista de los resultados, actualmente se encuentra en proceso de adjudicación una segunda tanda de 41 huertos colindantes con los que ya están siendo explotados en los naranjales del parque del Alamillo, a los que aspiran tanto particulares como colectivos. En esta ocasión se ponen en uso 24 parcelas de 98 metros cuadrados cada una y otras 16 cuya superficie es de 90 m2 aproximadamente, así como una parcela de 70 m2, de la convocatoria anterior que posteriormente quedó vacante.

 

Aspiran a estos huertos tanto grupos de personas físicas, de 3 a 10 miembros, como entidades sin ánimo de lucro formalmente constituidas. Los particulares o colectivos interesados en acceder a estas parcelas deben acreditar la mayoría de edad y el empadronamiento en el área metropolitana. En el caso de colectivos, también deberán acreditar que su ámbito de actuación se encuentre dentro de dicha área metropolitana.

 

 

Al igual que en el Parque de Alamillo, AVRA viene impulsando iniciativas de reutilización de suelos para huertos sociales en otras zonas de Andalucía. Hasta ahora, las que más consolidadas están son las iniciadas en el barrio granadino de Almanjáyar y en la barriada de la Piñera, en el municipio campogibraltareño de Algeciras.

 

En Almanjáyar se han desarrollado dos iniciativas, ambas en suelos urbanos residenciales que no han tenido desarrollo como tales. Se trata de los 20 ecohuertos de la zona de Joaquina Eguarás --19 parcelas de 50 m2 y una de 100m2--, que están siendo trabajadas por unos 150 hortelanos, y los huertos urbanos de La Madraza, con unos 200 hortelanos trabajando sus tierras en 24 parcelas de 50 m2 y otras 8 de 100 m2. En ambos casos, quienes participan en esta experiencia están agrupados en sendas asociaciones denominadas ‘Nortelanos La Madraza’ y ‘Nortelanos Joaquina Eguarás’.

 

Tanto en el Alamillo como en Almanjáyar, la Junta se ha ocupado de preparar la infraestructura necesaria para que los huertos pudieran ser una realidad. Para ello, se han instalado sistemas de riego, se ha realizado el vallado perimetral de las parcelas y se han construido casetas para que los hortelanos puedan guardar sus aperos.

 

También se construyeron esas instalaciones e infraestructuras en la barriada La Piñera, donde en un suelo calificado como zona verde y cedido por el Ayuntamiento de Algeciras para esta experiencia, se han puesto en marcha 50 huertos, todos explotados por personas jubiladas constituidas en una asociación, salvo una parcela que está cedida a un colegio del barrio para que sean los alumnos quienes aprendan las técnicas de la horticultura y tengan un lugar donde practicarlas.

 

 

Mientras las iniciativas en el Alamillo, Almanjáyar y Piñera se encuentran a pleno rendimiento, en otros puntos están iniciando su andadura, como San Bartolomé de la Torre, en Huelva, donde Junta y Ayuntamiento firmaron en 2014 un convenio mediante el cual la Agencia de la Vivienda y Rehabilitación de Andalucía ha cedido por un período de cinco años suelo de su propiedad al municipio para el desarrollo de los huertos urbanos.

 

Un lugar destacado ocupan los suelos cedidos a la Asociación de Parados Agrarios y Forestales ‘Gilillo’, en Cazorla, para la explotación de un olivar situado en un suelo propiedad de la Consejería de Fomento y Vivienda, que en la campaña 2013-2014 generó un centenar de jornales en labores de mantenimiento y recogida de la cosecha a ocho personas en situación de desempleo. La recolección en dicho olivar dejó más de 20.000 kilos de aceitunas, convertidas en unos 5.000 litros de aceite por cooperativas de Cazorla, Quesada y La Iruela.