Boletín Oficial de la Junta de Andalucía - Histórico del BOJA Boletín número 108 de 24/10/1992

En el Recurso Contencioso-Administrativo núm. 491/86, interpuesto por D. Francisco Solís Villa, la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Territorial de Sevilla ha dictado sentencia con fecha 13 de mayo de 1988, la cual ha cobrado firmeza estimatoria de las pretensiones del recurrente, cuyo fallo es del siguiente tenor literal:

«Fallamos. Debemos estimar y estimamos el Recurso Contencioso Administrativo interpuesto por el Procurador Sr. López de Lemus en nombre y representación de D. Francisco Javier Solís Villa contra los acuerdos de la Dirección General de Asistencia Hospitalaria y Especialidades Médicas de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía de 8 de enero de 1986 el que debemos anular y anulamos por no ser conforme con el ordenamiento jurídico y en consecuencia debemos declarar y declaramos el derecho que asiste al actor de ser nombrado Jefe de Servicio de Medicina Interna del Hospital Nuestra Señora de Valme de Sevilla desde el momento en que debió serlo a consecuencia de la renuncia del primeramente nombrado para el desempeño de la plaza citada y con los efectos legales que se deriven de esta declaración. Sin costas¯.

En su virtud, y de conformidad con lo establecido en los artículos

103 y siguientes de la Ley reguladora de la Jurisdicción Contencioso Administrativa esta Dirección General de Personal,

RESUELVE

Llevar a puro y debido efecto la ejecución de la sentencia firme de la Audiencia Territorial de Sevilla de fecha 13 de mayo de 1988 y en consecuencia:

Primero. Nombrar Jefe de Servicio de Medicina Interna del Hospital Nuestra Señora de Valme, Area Sur de Sevilla a D. Francisco Javier Solís Villa.

Segundo. Este nombramiento tendrá efectos legales desde

17.9.85, fecha de la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la Resolución de 15 de julio de 1985, por la que se declaraba desierta por renuncia la jefatura citada. No obstante, la determinación de los efectos económicos que se desprendan de este reconocimiento, vendrá constituida por la diferencia entre la cantidad que le corresponde legalmente y la que ya le ha sido abonada en el puesto de trabajo que viniere desempeñando durante el citado período.

Tercero. El plazo de toma de posesión del puesto será de un mes, a contar desde el día siguiente al de la publicación de la presente Resolución. De no tener lugar la misma en el plazo fijado, se entenderá que renuncia a la plaza.

Sevilla, 15 de octubre de 1992.- El Director General de Personal, José Antonio Souto Ibáñez.

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