Todos los días son 8 de marzo

Equipo de Coordinación Pedagógica del Programa para la Innovación Educativa, Hábitos de Vida Saludable.

...Valga como ejemplo el día en que se sale a la luz esta publicación (9 de marzo), para dar aún más sentido a la afirmación de que “todos los días deberían ser 8 de marzo”. Acciones como esta corroboran que la sociedad está cambiando, y con ella el papel de la mujer. Un mayor reconocimiento de la figura femenina y el progreso que alcanzamos día tras día con nuestras acciones justifican esta afirmación.

La fecha escogida para conmemorar este día fue a consecuencia de un terrible suceso que se produjo en 1911, en el que un incendio en la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist, de Nueva York, se cobró la vida de 146 mujeres obreras, en su mayoría jóvenes, a las que los dueños de la fábrica dejaron encerradas para evitar robos en su interior. Sin embargo, no fue hasta el 8 de marzo de 1977 cuando Naciones Unidas declaró “El Día Internacional de las Mujeres”, representando con el color lila los esfuerzos que este colectivo realiza en la lucha por la igualdad de género en nuestra sociedad.

Cada vez somos más permeables a los cambios de leyes que promueven la igualdad, las empresas ofrecen condiciones más igualitarias que contribuyen a disminuir la brecha condicional entre personas, las familias son más conscientes de que hacer ver a sus hijos e hijas que todos los seres humanos deben ser tratados del mismo modo es la única garantía para alcanzar la verdadera igualdad.

Según la OMS, la salud se identifica con un estado de bienestar físico, mental y social completo. Diferentes estudios y experiencias señalan que el conocimiento de la salud en la población actual adolece de un análisis crítico que permita la visualización de cómo esta puede afectar a mujeres y hombres de forma diferenciada, lo que significa incorporar el género al análisis de salud. Este hecho puede deberse a las diferencias biológicas y sociales que existen entre uno y otro sexo, y que en el caso de la mujer es especialmente preocupante, por las situaciones de desventajas y discriminación que han padecido históricamente.

Así mismo, entre los factores socioculturales que más impiden que las mujeres y niñas se beneficien de servicios de salud de calidad y alcancen el máximo nivel posible encontramos el de las desigualdades en las relaciones de poder entre hombres y mujeres, las normas sociales que reducen las posibilidades de recibir educación, las oportunidades de empleo, la atención exclusiva a las funciones reproductoras de la mujer, la exclusión de las mujeres de los ámbitos del poder y de la participación en la toma de decisiones y su confinamiento histórico al interior del hogar y al cuidado de otras personas.

Una manera eficaz de favorecer la igualdad desde las escuelas es hacer que la coeducación sea la gran protagonista en los modelos de enseñanza. Coeducar consiste en eliminar estereotipos y valorar la diversidad con respeto y tolerancia. La Consejería de Educación y Deporte está apostando por estos modelos en su II Plan Estratégico de Igualdad de Género en Educación. Así mismo, a través de los Programas para la Innovación Educativa, como el de Hábitos de Vida Saludable, concebido desde una perspectiva salutogénica de promoción de la salud y bienestar en el alumnado, se trabaja una linea de intervención específica relacionada con la sexualidad y las relaciones igualitarias, abordando el buen trato y la corresponsabilidad entre hombres y mujeres, las bases para el mantenimiento de relaciones igualitarias saludables y la prevención de la violencia de género, entre otras temáticas.

El Equipo de Coordinación Pedagógica de este Programa es un grupo de docentes que, repartidos por toda la geografía andaluza, asesoran pedagógicamente a los centros. Entre sus funciones está la tarea de acompañar a los coordinadores y coordinadoras y a sus equipos de promoción de la salud en los casi 2.800 centros educativos inscritos, en el diseño, desarrollo y valoración de actuaciones que fomenten la igualdad entre nuestros escolares.

Este EQUIPO conoce y valora todos y cada uno de los Planes de Actuación de los centros andaluces inscritos en el Programa y detectan prácticas de éxito relacionadas con este y otros ámbitos, que sirvan para ser exportadas y replicadas en otros centros, sirviendo como referentes para otros escolares y docentes de la provincia o incluso de la comunidad.

Igualmente, a través de los Programas para la Innovación Educativa, es importante visibilizar el talento del alumnado en general y de las niñas y jóvenes de nuestras aulas en particular. Un recurso muy válido para trabajar el feminismo y la igualdad puede ser el conocimiento y estudio de referentes (rolmodel), en los que nuestros escolares se vean reflejados, provocándoles la motivación suficiente para enarbolar la bandera del “yo también puedo”. La presentación y el conocimiento de rolmodels cercanos hacen que el interés y la motivación aumenten, incentivando las ganas de descubrir a otros de distintos ámbitos que se acerquen a cada persona según el rol de vida con el que cada cual sienta mayor conexión.

En relación con las jóvenes interesadas en las ramas de ciencias, es importante darles a conocer a personalidades como la científica Margarita Salas, bioquímica española que trabajó con Severo Ochoa y que fue elegida en 2001 entre las 100 Mujeres del Siglo XX que abrieron el camino a la igualdad. Es autora de la patente más rentable del CSIC y una infatigable trabajadora, formadora de generaciones de investigadores, que incluso llegó a ser conocida como la "Marie Curie" nacional. Se trata, por ello, de una persona inspiradora para las futuras generaciones.

Por otra parte, a modo de ejemplo y centrándonos en un entorno más cercano, hay niñas que día a día practican deportes de todo tipo y pueden verse inspiradas por referentes cercanos como Alba Sánchez, que ha tenido que luchar para conseguir jugar al fútbol (actual componente de la selección cordobesa alevín), o Carmen Avilés, atleta de élite, que incluso ya comparte sus experiencias dando charlas inspiradoras en algunos centros educativos.

Otro ejemplo destacable, esta vez a nivel institucional, es la campaña “Todos/as Olímpicos/as”, organizada por el Comité Olímpico Español en colaboración con la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, donde contamos con rolmodels de la talla de la nadadora sevillana de sincronizada Raquel Navarro o la taekwondista Muriel Bujalance, con medallas a nivel europeo.

Actualmente, ambas deportistas llevan a cabo talleres dentro de esta campaña con el alumnado de centros educativos, donde dan difusión a los valores olímpicos y hacen promoción de la práctica deportiva como alternativa a la marginalidad social y la desigualdad entre chicos y chicas. Es fundamental aprovechar estos principios y valores para potenciar comportamientos positivos entre el alumnado.

Finalmente, podemos concluir que la educación para la igualdad ha tenido siempre su lugar en los itinerarios curriculares, como recurso y como activo de lucha contra las desigualdades. Hoy día se encuentra muy presente en nuestros Programas para la Innovación Educativa, desde los que se trabaja de manera muy activa en esta noble, sensible y necesaria causa. Es el componente femenino el que durante todos y cada uno de los días, con su trabajo, esfuerzo y dedicación, ha ayudado a construir un mundo más igualitario en el aula y en la sociedad, porque como dice Amelia Earhart, “La manera más efectiva de hacerlo, es hacerlo”.

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Han colaborado como coautores/as de este artículo:

Virginia Payán Almendros
Carmen García Ruise
Julia Gracia Ordóñez
María Victoria Fernández-Arenas Martínez
Pedro Jesús Marina Aranda
Estefanía Velázquez González
David Carraso Pérez
Ana Belén Martínez Amoros