Atlas de Historia Económica de Andalucía ss XIX-XX

Atlas de Historia Económica de Andalucía ss XIX-XX Web de la Junta de Andalucía

SISTEMA FINANCIERO

Los antecedentes del sistema financiero en Andalucía se remontan a los comerciantes banqueros y la caja del Banco de San Carlos de Cádiz, muy ligados al tráfico colonial, y a los montes de piedad (Granada y Jaén) y otras fórmulas de la órbita benéfica. Para mediados del XIX, la región protagoniza ciertas iniciativas financieras: la fundación de cajas de ahorros a partir de 1834 y en el ámbito societario, la creación de bancos emisores de moneda y sociedades de crédito, que dejan paso en la década de 1870 a la entrada del Banco de España como principal entidad bancaria, junto con la persistencia de una atomizada trama de banqueros locales.

La modernización del sistema arranca en el siglo XX con la expansión por la región de la banca privada nacional, que llega a hacerse con más del 80% del mercado, paralela al debilitamiento del papel comercial del Banco de España, cajas de ahorros y casas de banca andaluzas. Desde mediados de la centuria se asiste a un proceso de concentración de la banca privada y a una reordenación que conduce en su etapa final al predominio de las cajas de ahorros y rurales como intermediarios financieros, al afianzamiento de la banca privada con alrededor de un tercio del mercado y a la práctica desaparición de las entidades bancarias con sede social en Andalucía.

En el período contemporáneo el sistema financiero andaluz denota, a grandes rasgos, una incapacidad para generar entidades propias duraderas, junto con su dependencia de instituciones ajenas a la región y una debilidad relativa en el contexto nacional, lastrado por la falta de capacidad que pone de manifiesto, por ejemplo, su volumen de depósitos, oscilando para esta etapa en torno a un 10% del total nacional, en una abierta diferencia desfavorable respecto a su porcentaje (hacia un 18%) de la población española.

Banca oficial en Andalucía 1853-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga mapa

Al antecedente de una Caja de Descuentos del oficial Banco de San Carlos en Cádiz (1785-1802), la única en España, en atención a su papel en el comercio colonial e internacional, siguió la Caja General de Depósitos, institución creada en 1852, ligada al Estado y a las necesidades de la Hacienda y la captación de ahorro más que a la inversión productiva; contó con sucursales en todas las capitales de Andalucía, destacando las de Cádiz y Sevilla.

Heredero del Banco de San Fernando, el Banco de España, entidad privada pero de carácter semipúblico hasta su definitiva nacionalización en 1962, actúa desde su reorganización 1874 y hasta el primer cuarto del XX como banco comercial, estableciendo en una década sucursales en todas las capitales provinciales andaluzas y Jerez, red que luego se amplía a otras poblaciones de importancia comercial, agrícola y minera, junto con un complejo entramado de corresponsalías. De nuevo sobresalen en este caso las sucursales de las provincias de Sevilla, Cádiz y Málaga. Un papel menor jugó el Banco Hipotecario, también nacionalizado en 1962, con sucursales en las capitales andaluzas desde su puesta en marcha en 1873 hasta integrarse en Argentaria en 1994.

Cajas de Ahorros y Montes de Piedad. Fundaciones y Trayectoria 1834-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga mapa

Desde el punto de vista cronológico fundacional, en el conjunto de Andalucía se crearon, según los datos disponibles, 27 cajas de ahorros y montes de piedad, 16 en el siglo XIX, a partir del efímero establecimiento de una en Jerez de la Frontera, y 11 en el XX. La Caja de Jerez fue la primera fundación de su clase en España y la de Granada, la tercera. Las trayectorias de las cajas han sido muy variadas, con abundantes interrupciones por causa de extinción, disolución o quiebra, hallándose entre 6 y 9 en activo entre fines del XIX y mediados del XX, y una cifra ascendente a partir de entonces, hasta sumar 14 en la década de 1980. En la década de 1990 se iniciaría un proceso de concentración mediante fusiones y absorciones que reduciría su número a 6 en 1995, tendencia que se ha prolongado en el siglo XXI. Promovidas desde su origen en el marco provincial, la provincia de Huelva no contó con una caja de ahorros en el siglo XIX, mientras que otras provincias (Cádiz, Granada, Jaén) llegaron a tener dos en algún momento.

Oficinas de Cajas de Ahorros en Andalucía 1944-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga tabla

El papel de las Cajas de Ahorros en el sistema financiero andaluz puede evaluarse desde varias perspectivas. En cuanto a sus depósitos, conocen una trayectoria ascendente desde la década de 1830 hasta 1900, cuando suman más de 14 millones de pesetas y una participación que suele superar el 10% del total en las cajas españolas. Entre 1900 y 1939 experimentan una fuerte caída, quedando con apenas el 2% de la cuota nacional. La tendencia cambia desde la década de 1940 y, en especial, en el último tercio del siglo XX, cuando las andaluzas recuperan una participación alrededor del 10% entre las cajas españolas, con unos depósitos de cuatro billones y medio de pesetas. Más restringida es la información de las oficinas de Cajas de Ahorros en Andalucía, que perfila su alcance territorial. Entre 1944 y 2000, reflejo de su expansión, pasan de 63 a 2.772, un quinto de las cuales son de entidades con sede social fuera de la región, destacando en cuanto a número de oficinas las provincias de Sevilla, Málaga y Córdoba. Al compararse las cifras de depósitos y oficinas, se aprecia una correlación desfavorable para las cajas andaluzas, al suponer los depósitos en torno al 10% del total nacional de las cajas y las oficinas alrededor del 15%.

Banca privada en Andalucía hasta el s. XX

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga mapa Descarga tabla

A mediados del XIX se crea en Andalucía un primer entramado de sociedades bancarias (bancos de emisión, sociedades de crédito), con una especial concentración en el polígono Cádiz-Sevilla-Córdoba-Málaga. Su tamaño fue, sin embargo, reducido, su actividad estuvo ligada sobre todo al comercio y su trayectoria sujeta a continuas eventualidades hasta su liquidación y la implantación del Banco de España en 1874 como única entidad emisora. El vacío de su desaparición lo llenarían los banqueros privados y cajas de ahorros, no apareciendo nuevas sociedades bancarias andaluzas, salvo la breve excepción del Banco de Andalucía en 1900, hasta mucho después de la Guerra Civil. La actividad de los banqueros privados fue asimismo limitada, episódica y de alcance muy variable, destacando en todo caso la de Pedro López en Córdoba y la banca Rodríguez Acosta en Granada. La presencia de sucursales de bancos foráneos fue extraordinariamente débil hasta el siglo XX.

Banca privada nacional y andaluza 1922

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga mapa Descarga tabla

Desde un papel irrelevante al comenzar el siglo XX, la banca privada de índole nacional experimenta una rápida expansión en Andalucía que se aprecia en la implantación territorial de sus sucursales en la década de 1920. Córdoba, Sevilla y Jaén, tanto las capitales como otras grandes poblaciones, son las provincias más atractivas para el negocio bancario por su riqueza agrícola y minera. Destaca la elevada presencia de ciertas entidades, sobresaliendo el Banco Español de Crédito con 21 sucursales, seguido a distancia por el Hispano Americano (11), Central (4), de Cartagena (3) y Bilbao (1), a las que se unirán otras (Vizcaya, Urquijo…) en breve plazo. Más irregular es la presencia de los bancos y banqueros con sede social en Andalucía, entidades de rango local o comarcal, tamaño muy variable y derivadas en su mayoría de los comerciantes banqueros. Llegan a alcanzar elevadas cifras, aunque sólo algunas se registraron y continuaron la actividad bancaria al estrecharse el marco legal en la década de 1920. En relación con el conjunto de la banca privada, ostentaron una participación de casi el 13% en 1922, cuota que en 1935 se había reducido a la mitad.

Oficinas bancarias en Andalucía 1919-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga tabla

Desde la segunda década del siglo XX, la multiplicación de oficinas bancarias en Andalucía es un fenómeno sostenido, reflejo en buena medida, por un lado, de la expansión de la banca privada en la región y, por otro, de la banca comercial y el entramado de servicios financieros. Una primera etapa de este crecimiento corresponde a las décadas de1920 y 1930, cuando se pasa de 30 a 237 oficinas y la banca privada llega a hacerse con el 80% de los depósitos (1935). Tras el período de relativa atonía de la Guerra Civil y postguerra, el crecimiento se reanuda a partir de la década de 1960, alcanzando el número de oficinas sus máximos en la de 1990, para retraerse levemente después, en competencia, tanto en sucursales como en servicios, con las Cajas de Ahorros. Sevilla, Córdoba, y luego Málaga, son las provincias que ocupan las primeras posiciones en estas cifras. En este lapso, la representación de la banca con sede social en Andalucía con respecto al total de oficinas de la banca privada detenta una cuota menor, de acuerdo con su peso secundario en la intermediación financiera, ascendiendo desde el 7,6% en 1962 al 27,3% en 1993, para retroceder al 15,3% en el 2000, en un movimiento similar al que siguió la participación de la banca andaluza en el total de depósitos (3% en la década de 1950, 20-25% en las décadas siguientes, 20% en 1994, 14% en 2000).

Cuota de Andalucía en el mercado bancario nacional 1900-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga tabla

En la evolución a lo largo del siglo XX del volumen de depósitos de las instituciones financieras en Andalucía (Banco de España, banca privada, cajas de ahorros, rurales y postal) se distingue una primera fase, hasta 1917, en que representan en torno al 10% del total nacional. En una segunda fase, hasta la mitad del siglo, se produce un descenso de hasta cuatro puntos, con mínimos durante la década de 1930. Desde 1951 se contempla una recuperación, para recobrarse una cuota alrededor del 10%. Si estas cifras se ponen en relación con el porcentaje de la población nacional que corresponde a Andalucía (17 a 19% en el curso del siglo) se aprecia la desviación respecto a la cuota de depósitos, expresiva de la debilidad económica regional.

Cuota de mercado de los intermediarios financieros en Andalucía 1900-2000

Fuente: Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Descarga tabla

En las dos primeras décadas del XX resalta el papel protagonista como intermediario financiero del Banco de España, con porcentajes hacia el 80-50% del mercado que se desploman después debido a sus cambios de función. Los beneficiarios son las Cajas de Ahorros, pese a sus modestos progresos y posterior retroceso hasta mediados del siglo, y, sobre todo, la banca privada, que experimenta un notable ascenso hasta hacerse con los mayores porcentajes en los decenios centrales de la centuria. El panorama vuelve a alterarse en la segunda mitad del XX, caracterizado por el avance de las Cajas de Ahorros, la irrupción de las Cajas Rurales y el reflujo de la banca privada, cuya cuota en el mercado financiero andaluz acaba por estabilizarse en torno a un tercio del mismo.

Billetes de 1.000 reales del Banco de Cádiz, hacia 1847, y de 200 reales del Banco de Málaga, 1856. Entre 1846, cuando se crea el Banco Español de Cádiz, y 1874 funcionan en Andalucía cuatro sociedades bancarias con capacidad de emisión de papel moneda (Bancos de Cádiz, Málaga, Sevilla y Jerez). Vinculados preferentemente a la actividad comercial y con escasa incidencia en el desarrollo industrial, fueron entidades de reducido tamaño, muy afectadas por la crisis financiera de 1866 y que en su mayoría acabaron por fusionarse con el Banco de España en 1874.

Antigua sucursal del Banco de España en Almería, en el edificio construido en 1902, y delegación del Banco de España en Sevilla a fines de los años veinte, junto a una sucursal del Anglo South American Bank. Entre 1874 y 1930, el Banco de España detenta un notable peso como entidad comercial en el sistema financiero andaluz, concentrando alrededor del 80% de los depósitos a comienzos del XX y contando con sucursales en las capitales y otras cinco grandes poblaciones. Tras su conversión en banco central en la década de 1920, cedería el protagonismo en la región a la banca privada.

Publicidad del Banco Español de Crédito en Córdoba, en una revista de 1925, y sucursal del Banco Hispano Americano en Linares (Jaén), en una postal de 1934. Desde el primer cuarto del siglo XX la banca privada nacional experimenta una rápida expansión en Andalucía, pasando de 30 oficinas en 1919, a 237 en 1936 y más de 1.000 en 1976. En las primeras décadas de este proceso, el Banco Español de Crédito ocupa una posición de claro predominio. Asimismo, la banca privada llega a controlar hasta el 88% de los depósitos del sistema financiero andaluz en 1950, cuota que luego desciende paulatinamente hasta el 33% en el año 2000.

Placa de la sede del Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Granada a fines del XIX, tarjeta de la Caja de Ahorros de Jerez de la década de 1980 y edificio de Unicaja en Málaga. Los montes de piedad y cajas de ahorros son un capítulo constante del sistema financiero andaluz contemporáneo. Con una modesta participación en el XIX y un descenso en la primera mitad del XX, conocen un crecimiento sostenido en la segunda mitad, con un porcentaje de depósitos del total regional que pasa de menos del 9% en 1951 a más del 53% en el año 2000. Hacia el fin de la centuria culmina un proceso de concentración en el que Unicaja queda como la primera entidad andaluza de su clase.

REFERENCIAS

Bernal, A. M. (dir.), Florencio Puntas, A. y Martínez Ruiz, J. I. El empresariado andaluz, en perspectiva histórica. Sevilla, 2010.

Martín Aceña, P. y Titos Martínez, M. (eds.). El sistema financiero en España. Una síntesis histórica. Granada, 1999.

Titos Martínez, M. El sistema financiero en Andalucía. Tres siglos de historia (1740-2000). Instituto de Estadística de Andalucía, Sevilla, 2003.

Titos Martínez, M. “Las Cajas de Ahorros en la historia de Andalucía”. Papeles de Economía Española. Historia de las Cajas de Ahorros: nuevas perspectivas, 105/106, 2005, pp. 132-153.