La inversión ha ido destinada a mejorar la climatización y los revestimientos del centro, así como a renovar la dotación interpretativa, integrando un sistema de paneles interactivos y gráficos con cuyo manejo se conocen aspectos relacionados con el valor del agua y, especialmente, de los cursos fluviales de Cazorla, Segura y Las Villas y la rica biodiversidad (flora y fauna) que albergan. Asimismo, se han habilitado unas peceras con ejemplares autóctonos del cauce del río Borosa.
Este centro de interpretación tiene entre sus principales atractivos una ruta a lo largo del curso combinado con varios puntos en los que practicar la pesca. El centro también permitirá, a través de unas pasarelas, el acceso controlado a los laboratorios de la cercana piscifactoría del Borosa, para poder conocer los trabajos de cría de especies autóctonas como el cangrejo y la trucha común.
El citado plan de revitalización, dotado con 35 millones de euro, cuenta con la planificación y apoyo de seis consejerías de la Junta de Andalucía, siendo la de Medio Ambiente una de las principales inversoras, con el objetivo de avanzar en la renovación de equipamientos, la oferta complementaria e infraestructuras que los visitantes reclaman al espacio protegido casi treinta años después de su declaración.
Uno de los protagonistas de este plan es el “triángulo de la interpretación” que constituyen el centro fluvial, el de visitantes y el jardín botánico, equipamientos situados en un radio de apenas dos kilómetros y que con más de 140.000 visitas anuales en algunos de ellos. Así, en el Jardín Botánico Torre del Vinagre se ultima una obra que cuenta con una inversión de más de 455.000 euros para dotar a las instalaciones de un nuevo edificio administrativo y un aula en la que dar respuesta a la creciente labor de educación ambiental que realiza. Junto al Centro de Visitantes Torre del Vinagre, remodelado en 2007 por completo, se adecua una vieja casa forestal para dar cobertura a otros usos de apoyo a la labor turística y didáctica con un presupuesto de casi 200.000 euros.
El Plan de Revitalización Turística del Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas alcanza en la actualidad un grado de ejecución que roza el 68%, con casi 23 millones de euros invertidos con el objetivo de mejorar la rica oferta de naturaleza, deportiva, cultural y patrimonial para impulsar el prestigio y la calidad que, para el visitante, siempre ha caracterizado a este enclave.
Entre las actuaciones que se han ejecutado, cabe destacar la construcción de cuatro miradores turísticos; la instalación de 87 kilómetros de biondas de madera; la señalización turística de Hornos y Segura de la Sierra; la restauración de las Ruinas de Santa María en Cazorla, o los incentivos por parte de la Junta de Andalucía a diecisiete establecimientos para la instalación de calderas de biomasa y dos instalaciones térmicas.
Además, por parte de la Consejería de Medio Ambiente se está trabajando en la adecuación de caminos forestales, la creación y mejora de senderos para la práctica de deportes, la renovación y adaptación a discapacitados de varias áreas recreativas y la elaboración de catálogos para la práctica de turismo activo.