CONSERVACIÓN DE LA BIODIVERSIDAD:
protección de la flora, la fauna y sus hábitats
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Proyecto de mejora del hábitat del buitre negro en el Parque Natural Sierra de Hornachuelos

Sevilla (octubre de 2006). La Consejería de Medio Ambiente ha sacado a concurso un proyecto de mejora del hábitat del buitre negro (Aegypius monachus) en el Parque Natural Sierra de Hornachuelos con el objetivo de proteger este núcleo y favorecer las condiciones para que otros ejemplares tomen la zona como lugar de cría. Este proyecto, dotado con un presupuesto de 730.202,72 euros, comenzará a ejecutarse una vez haya sido adjudicado.

La pérdida o deterioro del hábitat de nidificación constituye un importante problema para esta especie. El principal riesgo en este sentido procede de los daños provocados por los incendios forestales. Aunque en los últimos doce años sólo dos incendios han afectado al núcleo de Sierra Pelada, otros usos de este parque natural y los propios trabajos de reforestación deben controlarse para que puedan ser compatibles con la conservación de la especie.

Una de las principales líneas de actuación está enfocada a favorecer las poblaciones de conejo, una de las presas más importantes para los predadores que habitan en el monte mediterráneo. Como ave carroñera, el buitre negro se beneficia de los restos de comida que dejan los predadores, por lo que favorecer la presencia de conejos supondrá mejoras no sólo para el buitre, sino para otros animales como el águila imperial. Con esta medida se pretende aumentar la calidad del medio donde se actúa para intentar reorientar la búsqueda de alimento de esta especie hacia zonas seguras donde no se utilicen de forma ilegal cebos envenenados.

Para aumentar el número de conejos, se ejecutarán trabajos selvícolas como desbroces controlados con el objetivo de favorecer el establecimiento de formaciones más maduras y con una cobertura arbórea importante; clareos y podas y eliminación de residuos. En este mismo sentido, también se acometerán mejoras en pastizales y abonados. Además, se realizarán acotados con cerramientos en varias fincas para proteger las zonas de siembra de pastizal y de podas del ganado mayor.

Asimismo, se acotarán cercados para la cría que se apoyarán con la construcción de majanos, comederos y bebederos cisterna que se alimentarán de agua de lluvia como salvaguarda ante la escasez de agua durante las estaciones más secas. Por último, se colocarán capturaderos de conejos encaminados a controlar el estado sanitario de las poblaciones.

Otras medidas estarán dirigidas a la reducción de molestias, especialmente durante la larga temporada de cría del buitre negro. Se colocarán señales prohibitivas de paso a vehículos en determinadas zonas y se dispondrán diferentes barreras de detención de vehículos motorizados.

El veneno, primera causa de mortandad no natural

Los registros de individuos muertos o ingresados en los Centros de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) durante los dos últimos años confirman que el envenenamiento con plaguicidas es la primera causa de mortalidad no natural de buitre negro en Andalucía, al menos en las aves adultas. Esta circunstancia toma un papel protagonista en el descenso de las poblaciones de esta especie en el Parque Natural Sierra de Hornachuelos, así como a las fluctuaciones que se han registrado en el núcleo de Sierra Pelada y a los fracasos en la cría.

En este parque natural, el uso ilegal de cebos envenenados constituye una práctica ilícita de gestión de algunos cotos de caza enfocada a mejorar la rentabilidad de la caza de la perdiz roja con reclamo a través de sus predadores naturales. Pese a no ser perseguidas, las aves carroñeras resultan afectadas por ingerir cebos y animales envenenados.

Con el aumento de las poblaciones de conejo se pretende, además de incrementar la disponibilidad de alimento, reducir los desplazamientos de los buitres en busca de comida en aquellos lugares donde los casos de envenenamiento son superiores. Por ello ha sido necesario crear infraestructuras encaminadas a acotar y restringir el tránsito rodado por Sierra Pelada, debido a la presión cinegética y de otro tipo de actividades que se dan en la zona.

Salvado de morir envenenado en Sierra Pelada

Precisamente, un buitre negro que fue encontrado a finales del mes de agosto con claros síntomas de haber sido envenenado ha vuelto este mes a sobrevolar el Paraje Natural Sierra Pelada y Rivera del Aserrador. Se trata de un macho en edad reproductora recuperado por los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente, que forma parte de la población que habita en el norte de la provincia de Huelva, donde nidifican casi cien parejas, el 41 por ciento de todas las existentes en Andalucía.

El buitre fue ingresado en el Centro de Recuperación de Especies amenazadas de San Jerónimo, donde los análisis confirmaron la intoxicación por ingerir algún tipo de plaguicida.

Para la suelta, el buitre fue equipado con un dispositivo de radioseguimiento y una anilla de plástico en la pata con un código alfanumérico legible a distancia mediante telescopio para estudiar su área de campeo, ya que los lugares que visitan las aves para alimentarse incluyen necesariamente los puntos donde éstas pueden resultar envenenadas.

El buitre negro figura en todas las listas de especies amenazadas. En Andalucía existen cuatro poblaciones principales de esta rapaz, que suman algo más de 230 parejas, lo que representa casi el quince por ciento de las parejas españolas y el doce por ciento de las europeas.