Sevilla (febrero de 2008). La Consejería de Medio Ambiente desarrolla un proyecto de cría en semilibertad de conejos silvestres en el Espacio Natural de Doñana, con la finalidad de ir liberando ejemplares y repoblar zonas donde escasea esta especie, tan importante en la alimentación de otras que se encuentran en peligro de extinción como el lince ibérico o el águila imperial.
Se trata de conejos de la misma subespecie que habita en Doñana. Fueron capturados en zonas con una alta densidad, para ser después trasladados al centro habilitado para ellos: unas instalaciones que contienen majanos rodeados de grandes praderas, tan amplias que suponen en realidad el espacio que en libertad usaría un conejo alrededor de su madriguera. En cada jaulón viven cincuenta ejemplares, con una densidad de un macho por cada cinco hembras -para evitar peleas entre ellos-, siguiendo fielmente lo que sucede con estas poblaciones en el medio natural.
Estas instalaciones, diseñadas por el técnico Carlos Urdiales en El Acebuche, llevan cuatro años en funcionamiento y tienen como objetivo la producción de conejos silvestres y el estudio de su comportamiento y características. Para ello se construyeron jaulas -cuyas dimensiones se adaptan al radio de 50 metros en los que estos estos animales se mueven en el entorno natural durante toda su vida- divididas en dos áreas para que, en el momento que sea comida una parte de la pradera, puedan pasar a la otra mientras se regenera la primera. Además, están techadas, ya que en el primer año de puesta en marcha de este proyecto observaron cómo disminuía el número de ejemplares, debido a que los conejos eran predados por aves como el búho real.
Cuando los conejos crían, los gazapos son conducidos a otras dependencias, donde viven hasta que consiguen el tamaño y peso ideal para ser soltados en el campo. Al año son liberados unos 500 ejemplares, con la finalidad de conseguir aumentar la densidad en algunos territorios, mejorando además su hábitat con la intención de que no busquen zonas de expansión fuera del Espacio Natural de Doñana.
En los cuatro años que la Consejería de Medio Ambiente lleva trabajando en este proyecto, se han liberado 1.800 conejos desde estas instalaciones, que se encuentran junto a las del Programa de Conservación ex situ del Lince Ibérico, y cerca también de otras dedicadas a la malvasía cabeciblanca y al salinete (fartet).
Repoblación de 400 ejemplares en Sierra Norte de Sevilla
Por otro lado, la Consejería de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir colaboran en el desarrollo de acciones destinadas a la recuperación de las poblaciones de conejo y a la mejora de su hábitat en el Parque Natural Sierra Norte de Sevilla a través de la reintroducción de 400 ejemplares, dentro de las medidas medioambientales compensatorias acordadas por la construcción del pantano de Melonares.
Esta actuación persigue igualmente la potenciación de las especies presa para la recuperación de especies amenazadas como el lince ibérico o el águila imperial.
En la iniciativa participan también las Sociedades de Cazadores de la Sierra Norte de Sevilla y el Instituto de Investigación de Recursos Cinegéticos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Los conejos que llegarán hasta la Sierra Norte proceden del Parque Natural Los Alcornocales, y se liberarán en una veintena de cercados instalados en fincas de Almadén de la Plata, El Real de la Jara y El Pedroso.