El Gobierno andaluz ha anunciado este martes, tras la reunión del Gabinete de Crisis constituido para hacer frente a la situación generada por el coronavirus, que ha cerrado la compra de 60.000 unidades de test rápidos de detección que son indispensables para hacer frente al virus y ha urgido al Gobierno de la Nación, que es quien ejerce el mando único y por tanto el encargado de la gestión centralizada, a que los test rápidos lleguen cuanto antes a Andalucía. En concreto, de los 640.000 que ha comprado el Gobierno central, deben llegar en torno a 120.000 test rápidos porque son los que equivalen al peso poblacional de la comunidad. Así lo ha indicado el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías Bendodo, quien ha comparecido en rueda de prensa junto con el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, tras la citada reunión, que ha sido presidida por el presidente de la Junta, Juanma Moreno. Bendodo ha destacado también que el Gobierno andaluz está redoblando los esfuerzos y que ya son 14 los laboratorios habilitados en hospitales andaluces para la recepción de muestras de coronavirus. Además, ya hay habilitados 30 puestos de test móviles, a los que se accede en vehículo. En este momento, estos test de detección rápida están destinados a personal sanitario y que trabaja en servicios esenciales de atención a la ciudadanía pero se irán activando según sea necesario, según ha señalado el consejero de la Presidencia. Asimismo, ha apuntado que el Gobierno andaluz se está moviendo intensamente en los mercados internacionales y ya ha cerrado la compra de cinco millones de mascarillas. "Hemos recibido 725.000 y en los próximos días se recibirán otros 1,4 millones", ha manifestado Bendodo, quien también ha destacado que se han repartido 45.000 mascarillas a municipios y diputaciones para los trabajadores de ayuda a domicilio.