Responsive menu mobile icon

Álvarez defiende que el derecho universal a la salud contribuye a la protección de toda la sociedad en su conjunto y evita desigualdades

14 Septiembre 2018
La consejera de Salud apoya que el Congreso se plantee la elaboración de una norma con rango de Ley que garantice la protección de este principio
Thumbnail

La consejera de Salud, Marina Álvarez, ha defendido que el derecho universal a la salud contribuye a la protección de toda la sociedad en su conjunto y evita desigualdades. Durante su intervención en el Nueva Economía Forum, Álvarez ha destacado que el "gran valor" de la sanidad universal es que su impacto alcanza a la salud de las sociedades, de la economía y del desarrollo.

Álvarez ha recordado que este principio "siempre ha sido uno de los valores más importantes" del sistema sanitario y que recientemente, con la convalidación en el Congreso de los Diputados del RDL 7/2018, se ha recuperado un "derecho fundamental y fundacional" del Sistema Nacional de Salud.

La titular de Salud ha reiterado que en Andalucía se ha continuado atendiendo a todas las personas que han necesitado asistencia sanitaria. Así, ha explicado que las personas situación irregular, que reciben atención a través de una tarjeta especial, no utilizan con frecuencia el sistema sanitario y no se ha producido un efecto llamada, frente al mensaje que se ha querido trasladar de que hay personas que vienen a abusar de nuestro sistema sanitario, aún en condiciones de extrema vulnerabilidad. A esto, ha añadido que, junto al RDL 7/2018, es necesario un "trabajo de información y pedagogía sobre el derecho de protección de la salud que asiste a todas las personas, independientemente de su situación económica, social o administrativa".

En este sentido, Marina Álvarez ha apoyado que el Congreso se plantee la elaboración de una norma con rango de Ley que "garantice esta protección a todas las personas en nuestro territorio y nuestras competencias, en función de sus necesidades de salud" y ha destacado que es "nuestra responsabilidad, como sociedad desarrollada y solidaria que defiende el Estado del Bienestar", y porque hay "evidencia de que los sistemas sanitarios públicos son los que mejor respuesta dan para garantizar el derecho a la salud de la población, a un coste asumible por la sociedad".

Una "inversión" y no un "gasto"

Álvarez ha señalado que una publicación de la Universidad de Harvard en la revista Science ha demostrado que la sanidad universal aumenta la productividad y reduce las desigualdades, contribuyendo a una mayor cohesión y desarrollo social en todos los ámbitos. Así, ha resaltado que en Andalucía, hay evidencia de los datos recogidos en este artículo científico, que llevan a considerar la salud como "inversión" y no como "gasto", y ha destacado que esta inversión supone un importante motor de desarrollo, crecimiento y creación de empleo que convierte a la sanidad pública andaluza en la "mayor empresa del país, la mayor organización del conocimiento de nuestra comunidad autónoma y de las que más han contribuido a generar cohesión social".

La consejera ha recordado que Andalucía siempre ha apostado por la planificación sanitaria a través del IV Plan Andaluz de Salud como "marco de referencia" y es la única comunidad autónoma que ha afrontado un IV Plan de Salud, y la única que lo ha aprobado, como una acción de gobierno, desde perspectiva de salud en todas las políticas. En este sentido, el actual plan destaca la consideración de la salud no solo como un derecho, sino también como un recurso para la mejora social y económica, orientado sobre los determinantes y la reducción de desigualdades mediante la salud en todas las políticas, con carácter participativo, reforzando el valor de lo público, y llevándolo hasta el escenario local en el que se desarrolla la vida cotidiana y todas las políticas públicas.

Asimismo, incorpora el concepto de activos en salud que son aquellos elementos o recursos que aumentan la capacidad de los individuos para mantener y sostener la salud y el bienestar. Este plan requirió un trabajo pormenorizado con todos los departamentos de gobierno y todas representaciones locales y ciudadanas, dando como resultado un plan participado que supone una verdadera acción de gobierno en respuesta a todas las recomendaciones internacionales.

Álvarez ha destacado que la reducción de las desigualdades se propone como uno de los compromisos del mismo ya que identifica las raíces de los problemas de salud en la interacción de sus determinantes, y propone acciones compartidas con otros sectores para mejorar los determinantes positivos para la salud y minimizar los que generan efectos negativos.

Mejora de resultados en salud

La consejera también ha reiterado que uno de los retos de los últimos años es "mejorar los resultados en salud y la atención especial a los problemas fijados" a través de Planes Integrales de Salud que plantean un conjunto planificado de actuaciones de los servicios sanitarios que, basadas en la evidencia científica, pueden contribuir a obtener mejores resultados en salud para un problema concreto, que sea relevante, bien por la carga de enfermedad, magnitud, complejidad de su abordaje o impacto. Estos planes abarcan todas las etapas de la intervención frente a un problema de salud: promoción de activos protectores, prevención y control de factores de riesgo, diagnóstico precoz, atención de calidad y fomento de la recuperación e involucra a todos los actores sanitarios y no sanitarios que puedan aportar su esfuerzo coordinado frente al problema.

La Consejería de Salud cuenta con veinte planes integrales, elaborados y desarrollados por profesionales de referencia, con la participación de las organizaciones científicas, profesionales y sociales relacionadas, y que están "contribuyendo manera importante a la mejora de la salud y de la calidad de vida de la población de Andalucía". Álvarez ha puesto como ejemplo la reducción en la mortalidad y la presencia de complicaciones en la diabetes, la reducción en los tiempos de respuesta ante eventos cardíacos o un aumento en la supervivencia por los cánceres tratables más frecuentes.

Concretamente sobre el Plan Integral de Diabetes, la consejera ha manifestado que en Andalucía ha disminuido la mortalidad por diabetes más que en la media nacional –a expensas de la mortalidad prematura-, del 66% frente al 48%. Asimismo, han disminuido las complicaciones por diabetes -medida a través de los ingresos hospitalarios por complicaciones de la diabetes (cardiovasculares, ictus…)-, disminuyendo en Andalucía un 36% frente al 21% de media nacional. Concretamente, también han disminuido las complicaciones agudas por diabetes (reducción del 41% para la cetoacidosis o la 46% para la descompensación hiperosmolar).

La diabetes ha dejado de ser la principal causa de ceguera, gracias al programa de detección precoz de retinopatía diabética que cuenta con más de 200 retinógrafos en la red de centros de Atención Primaria, facilitando así el acceso de la población a esta prueba diagnóstica. A cierre de 2017 se habían incluido en el programa más de 420.000 pacientes, lo que supone una cobertura superior al 90% de la población diana. Se han realizado más de 750.000 pruebas de cribado, y entre ellas, un 7,2% presentaban lesiones, y su detección precoz nos permitió realizar abordajes para prevenir un deterioro visual grave. Ha sido reconocido como buena práctica en el ministerio y la OMS.

En Andalucía alrededor de un millón de personas tiene diabetes, estando diagnosticadas sólo 630.000. La consejera también ha recordado las innovaciones que se van incorporando a la cartera de servicios, como han sido los sistemas de monitorización de glucemia (flash y bomba-sensor) o la dispensación de agujas de insulina a través de las oficinas de farmacia, gracias a la colaboración con el Consejo Andaluz de Colegios Farmacéuticos y al uso de la receta electrónica. Esto último ha permitido, según la titular de Salud mejora la accesibilidad, disminuye la reutilización y mejora de la percepción del usuario.

Enfermedades priorizadas

Marina Álvarez ha señalado que Andalucía ha puesto en marcha una estrategia vinculada que prioriza nueve problemas de salud que ya cuentan con planes integrales y que son cáncer, diabetes, salud mental, cuidados paliativos, cardiopatías, ictus, dolor, enfermedades músculo-esqueléticas y enfermedades crónicas, ya que "concentran la mayor parte de la actuación sanitaria".

Los distritos de Atención Primaria y Hospitales que comparten una misma población de referencia, trabajan de forma conjunta para adaptar a su territorio cada uno de estos nueve planes integrales priorizados a fin de obtener los objetivos previstos con el fin de que cuenten con un Plan integrado operativo local (PIOL) por cada uno de estos planes integrales. Esta medida se ha planificado con la participación del conjunto de profesionales que van a estar implicados en su implantación.

La consejera ha resaltado que los objetivos específicos de estos planes, acordados entre los profesionales, buscan mejorar la accesibilidad y la continuidad en los servicios necesarios para cada población, así como la formación y las alianzas para lograrlo, en el en el ámbito local, que es el "más efectivo para situar las políticas y acciones de salud pública".

167 municipios en la Red Local de Acción en Salud

En Andalucía se puso en marcha durante los años 2008-2010 un proyecto piloto, el proyecto RELAS (Red Local de Acción en Salud) para llevar al municipio, con el liderazgo de los Ayuntamientos, acciones para la prevención y la promoción de la salud, adaptadas al territorio. A través de estos planes, se promueven acciones dirigidas a mejorar el nivel de salud de su población, desde las distintas políticas: vivienda, urbanismo, medio ambiente, cultura, empleo, educación, igualdad, juventud, o políticas sociales, entre otras; con la participación de líderes sociales, familias, medios de comunicación y agentes de la comunidad, utilizando los recursos que les son propios y generando los mejores activos en cada territorio.

En la actualidad, a esta Red se encuentran adheridos 167 municipios, lo que supone más del 20% (21,33%) de los ayuntamientos de Andalucía, dando cobertura a más del 50% de la población andaluza (50,08%).

La consejera ha asegurado que la referencia de este trabajo es la Estrategia de Calidad del Sistema Sanitario Público de Andalucía, que utiliza herramientas como la gestión por competencias, clínica, por procesos y del conocimiento y que "entronca con las líneas transversales propias del sistema": la Bioética, la Seguridad del paciente, las políticas de Formación o de Investigación e Innovación en Salud.

Marina Álvarez ha recordado también que en las últimas décadas se han desarrollado en Andalucía instrumentos que han mostrado su eficacia, con muy buenos resultados en salud, como las Escuelas de Pacientes, los Grupos de Atención Socioeducativa (GRUSE), las Guías de Atención Compartida (Al lado), las Comisiones de Participación en los centros o la implicación de las ONGs en estrategias de mediación y acercamiento. Se trata de una estrategia de participación y protagonismo, tanto de profesionales como de la población, que "están llamadas a ser el núcleo de la calidad del Sistema Nacional de Salud", según ha destacado Álvarez.