El Ifapa sigue avanzando en el aprovechamiento sostenible del alga invasora

IFAPA
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El Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa) está llevando a cabo la investigación “Caracterización del alga invasora Rugulopteryx okamurae y posible valorización de su biomasa en las costas de Andalucía” y ha iniciado recientemente el proyecto “Seaweed extracts: aplications in grapevines. Effects on soil, grapevine, grape, must and wine. A multidisplinar approach”. Conocido como ‘Seawines’, esta iniciativa coordinada por el Ifapa cuenta también con la participación de expertos de la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU), el Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario (NEIKER) y el Instituto de Ciencias de la Vid y el Vino de la Rioja (ICVV). 

En este proyecto, aprobado recientemente por la Agencia Estatal de Investigación y cuya duración será de tres años, se evaluará la eficacia de los extractos elaborados a partir de las algas Ulva ohnoi y R. okamurae para el control de las enfermedades fúngicas de mayor incidencia en viña (oídio y mildiu). Ulva ohnoi es un alga verde de fácil cultivo y alta productividad y R. okamurae es una especie invasora que se detectó por primera vez en las costas de Ceuta en 2015, y desde entonces se ha expandido de forma significativa a las de Málaga y Cádiz, alcanzando también las de Almería, Levante y Baleares, provocando graves problemas.

En concreto, ‘Seawines’ estudiará cómo influye la aplicación de estos extractos en la respuesta inmune, la fisiología, la microbiota y el desarrollo de la vid, así como, en la composición de la uva y la calidad del vino. Todo ello con el fin de conseguir unas plantas más saludables, una mayor biodiversidad en suelo y planta, y una mejor calidad de la uva y del vino obtenido a partir de ellas.

El proyecto abre un camino hacia el empleo de estas algas en programas de manejo de enfermedades en viticultura, lo que permitiría reducir el uso de productos químicos, valorizar los polisacáridos de las algas, aumentar el valor añadido de los vinos orgánicos y de alta calidad, además de dar una salida a la importante acumulación de R. okamurae que se está produciendo en nuestras costas.