El parque alberga la vía verde de Matagorda, que integra los restos industriales ligados al primer ferrocarril andaluz: la línea Jerez-El Puerto-Trocadero.
El descubrimiento de la máquina de vapor y su aplicación al ferrocarril fue toda una revolución y cambió el concepto de la distancia y el transporte, ya que lo que antes era una distancia que precisaba de un par de días para ser recorrida, como la que había de Sevilla a Cádiz, pasaba a durar media jornada.
En 1852 se crea la Sociedad de Ferrocarril entre Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa María y Cádiz para la construcción de un ferrocarril de Jerez a Cádiz por el Trocadero y el Castillo de Puntales, con un empalme a El Puerto de Santa María. En 1854 concluyó la construcción del primer tramo, de
Esta línea férrea que discurre por el parque como vía verde (primera línea férrea en Andalucía si consideramos el uso del tramo de Jerez al Portal y a El Puerto de Santa María, de 1852, y primer proyecto de España) se convirtió en el eje vertebrador de la línea Jeréz-Sevilla y
La estación de Empalme
Se trata de un pequeño edificio realizado en obra, con muros de piedra ostionera y ladrillo.
El suelo está realizado con baldosa hidráulica monocroma en rojo o blanco que lo decora a modo de ajedrezado. Junto a éste están los andenes, hoy no visibles.
En la trasera existe un jardín y una plataforma de adoquín sobre la que se construyeron dos aljibes.
Se trata de una estructura realizada entre 1856 y 1858 donde se construirá el primer cambio de aguja y empalme ferroviario del territorio español.
Conectaba la antigua línea férrea de Jerez al Trocadero con las ciudades de Puerto Real, San Fernando y Cádiz. Es el origen de la línea Sevilla- Cádiz.
Muro para vía Decauville de Salina de San Fermín y San Francisco Javier y su embarcadero.
La vía Decauville es un tipo de ferrocarril desmontable de vía estrecha, especialmente indicado para transportar vagonetas en espacios industriales. Destaca un tramo de muro para vía Decauville, que ha sido recuperado como sendero, comunicando la Vía Verde de Matagorda y el Sendero Principal de La Algaida. Funcionaba ya a finales del siglo XIX, vinculada a un embarcadero en el río de San Pedro, y se utilizaba en el transporte y funcionamiento de una salina y un molino de marea situados en la proximidad del parque, la Salina de San Fermín y San Francisco Javier, y del que solo se conserva parte del molino mareal.
El puente de San Alejandro.
Es el primer viaducto metálico realizado para ferrocarril en España. El viaducto original para salvar el río Guadalete, de madera, pronto se manifestó insuficiente, por lo que se propuso una estructura más duradera. De ahí que ya en 1860, la ROP presentara en portada la construcción del puente del ferrocarril para salvar el Guadalete. También se hizo lo propio para salvar el río San Pedro, pero no quedan restos.
El ramal ferroviario de la Siderurgia
Para la construcción de la industria siderúrgica se instaló un ramal del ferrocarril al Trocadero. De este modo, se pudo suministrar material de forma rápida y económica, al tiempo que se garantizaba una fácil salida de la mercancía.
La Siderurgia de La Algaida
Otro elemento industrial destacable son los restos de una instalación para un horno Martin Siemens junto al río de San Pedro. Este tipo de hornos tienen respiraderos para el aire, lo cual se identifica con las galerías y toberas que se conservan en el parque metropolitano.
Se conocía la existencia de este elemento por la referencia en los años 90 de un documento en AMPR y la existencia de un plano de finales del siglo XIX titulado Croquis de la Península del Trocadero, donde se sitúan los diferentes elementos industriales existentes en dicho enclave y en sus aledaños, incluyéndose un espacio que reza: Emplazamiento de la Fábrica de Acero. El espacio señalado en el plano coincide, una vez georreferenciado el plano, con la ubicación de las ruinas con que se pueden identificar por ello con el denominado Alto Horno de la Algaida o La Siderurgia. (Topónimo de la Zona)