El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy la creación del Comité de Reservas de la Biosfera de Andalucía. Este órgano asesor de la Junta será el encargado de coordinar la gestión de los siete espacios naturales andaluces que actualmente se acogen al Programa MAB (Hombre y Biosfera) de la UNESCO, cuyo objetivo es la preservación de la diversidad biológica y el uso sostenible de sus recursos. El Comité, primero de estas características que se crea en una comunidad autónoma, dependerá de la Consejería de Medio Ambiente, donde tendrá su sede.
Entre otras funciones, el nuevo órgano promoverá la declaración de nuevas Reservas de la Biosfera y la difusión de sus valores; prestará asesoramiento al representante andaluz en la Comisión Nacional Española de Cooperación con la UNESCO y propiciará el intercambio de información entre los gestores de las reservas andaluzas y el Consejo Internacional de Coordinación del Programa MAB.
El Comité estará integrado por los distintos responsables ejecutivos de la gestión de las Reservas de las Biosfera de Andalucía; dos representantes del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC); otros dos de la comunidad docente universitaria; dos expertos en el campo del medio ambiente y los directores generales de Planificación y de Participación y Servicios Ambientales de la Junta de Andalucía. El presidente será nombrado por el consejero de Medio Ambiente entre personas de reconocido prestigio y experiencia en materia medioambiental.
El decreto aprobado hoy por el Gobierno andaluz, de acuerdo con sus competencias en materia de espacios naturales protegidos, respeta tanto el marco estatutario de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera como las funciones asignadas por el mismo a la Comisión Nacional Española de Cooperación con la UNESCO.
Andalucía concentra actualmente siete de los quince espacios naturales declarados Reservas de la Biosfera por la UNESCO en España. Sus 590.341 hectáreas de superficie representan el 64% del total nacional. Estas reservas son la Sierra de Grazalema (51.695 Has.), declarada en 1977; Doñana (77.260 Has.), declarada en 1980; las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas (214.300 Has.) y las Marismas del Odiel (7.158 Has.), ambas declaradas en 1983; Sierra Nevada (171.646 Has.), declarada en 1986; la Sierra de las Nieves (18.592 Has.), declarada en 1989, y Cabo de Gata (49.690 Has.), declarada en 1997.