Pedro y Benito Jiménez son los artistas flamencos del futuro. Con más de 20 años de trayectoria en las artes vivas, el audiovisual y la cultura crítica, se han consolidado como una rara avis en el panorama creativo. Como ellos mismos cuentan, escuchaban el flamenco que sonaba en la radio del autobús de línea, al mismo tiempo que el breakbeat que salía de sus cascos. Desde entonces, llevan años desarrollando laboratorios para poner en común estos géneros y los conceptos que los rodean, siempre desde una perspectiva que une diversión, queja, reivindicación y sentido del humor.
Su aportación al lenguaje artístico, a través de laboratorios, procesos de investigación y colaboraciones, los ha llevado a introducir este ancestral género en escenarios como el Sónar Festival (edición de 2015 con Raverdial), así como en espacios tan emblemáticos como la Bienal de Flamenco de Sevilla, el Festival Flamenco de Londres, el Festival Grec y un largo etcétera de circuitos asociados al live cinema, la electrónica y la creación contemporánea. Destacan especialmente sus aclamadas piezas Flamenco is not a crime (2019) y JALEO IS A CRIME (2022).
Su interés por realidades cuánticas que conviven sin apenas tocarse ha dado lugar a propuestas como Borderhack (2016), .nomedia (2021), El 92 cava con todo (2022) o [Stil] NO TELEVISED (2023). Las fronteras físicas y mentales, el control social a través de la tecnología o la figura del activista afroamericano Gil Scott-Heron conforman un desarrollo narrativo que pone el foco en problemáticas que atraviesan la sociedad actual.
En el ámbito de la formación, llevan años impartiendo talleres dirigidos a artistas y estudiantes de distintas disciplinas, como el taller Political Remix Video: ¿Cómo lo hacen Los Voluble? o Nuevo Archivo Flamenco de Los Voluble.