La fiesta del Corpus Christi, que se celebra tradicionalmente cada mes de junio en Huéneja, destaca por la elaboración de altares portátiles, que se montan en las calles y plazoletas de la localidad.

La confección de los altares es asumida por las mujeres del pueblo, en su mayoría de mediana edad, que los decoran con sábanas, alfombras, una cruz, utensilios de cobre, cerámica y gran cantidad de plantas y flores. El recorrido de la procesión viene determinado por la ubicación de los altares. Al finalizar la solemne misa, la Custodia y el sacerdote, acompañado por los niños y niñas que han hecho la comunión y todos los vecinos, inicia el recorrido, visitando cada uno de los altares portátiles. En cada uno se dispone la custodia, el sacerdote reza un responso y los niños y niñas lanzan pétalos de rosa, tras la bendición, ante la emocionada mirada de las mujeres y el deleite de la comunidad. En este ritual la participación es fundamentalmente femenina. Para la consecución de las actividades que se enmarcan en el desarrollo de la celebración se organizan en grupos y por barrios.

Junio.
La celebración del Corpus Christi tiene lugar el jueves, concretamente sesenta días después del Domingo de Resurrección. Sin embargo en esta localidad se ha trasladado al domingo siguiente.