Dos universos cantaores se dan la mano en El ayer y el hoy. Por un lado, la jondura de la voz de Rancapino, que le convierte en uno de los mayores exponentes del cante jondo. Por el otro, su hijo Alonso Núñez, Rancapino Hijo, que ha heredado de su padre el nombre y el don del cante puro, al que añade el aire del flamenco joven.

En el espectáculo se muestran estas dos generaciones de cantaores flanqueados por otras dos generaciones de la guitarra: Fernando Moreno e Isaac Moreno. Alonso Núñez Núñez, Rancapino, hijo de Manuel Orillito y hermano de Ramón y Juan Orillo, es heredero de una tradición flamenca incontestable y fuel a las esencias más genuinas del cante gaditano. Domina desde la soleá a la seguiriya, pasando por los tangos y la malagueña de El Mellizo. Pocos viven ya el flamenco como él. Parafraseando a Manolito de María, cuando Rancapino canta se acuerda de lo que ha vivido.

Llegó a Madrid con 17 años. Era la época dorada de los tablaos y pronto encontró trabajo en Torres Bermejas. Fue el inicio de un tiempo en el que convivió con artistas como Fernanda y Bernarda de Utrera, Camarón, etcétera, con quienes compartió no pocas anécdotas. Su hijo, Alonso Núñez Fernández, se dio a conocer a los 6 años en el programa Veo, veo. Debutó en el Gran Teatro Falla acompañado por Paco Cepero. Era el primero de los grandes guitarristas que luego actuarían con él, como Juan Habichuela -en cuyo disco homenaje participaría con 10 años- o Moraíto. Tras participar en numerosos programas de televisión se presentó con 22 años en el concurso de la Peña Flamenca de Chiclana de la Frontera, donde logró el primer premio. Ha actuado en numerosos festivales, peñas flamencas y teatros.

Espectáculo programado dentro del ciclo Flamenco Viene del Sur.