Las localidades de Bujalance y El Carpio, pertenecientes a la comarca cordobesa del Alto Guadalquivir, celebran cada ocho de diciembre la Fiesta en honor a la Inmaculada Concepción, más conocida como el "Voto a la Inmaculada Concepción". Celebración de carácter exclusivamente religioso, la devoción profesada por ambos pueblos se remonta décadas atrás cuando, en tiempos de epidemias, se invocaba la protección de Virgen. Como muestra de agradecimiento las poblaciones resolvieron hacerla patrona y jurarle voto de fidelidad y defensa de su Inmaculada Concepción. En Bujalance los preparativos ocupan al ayuntamiento y a la asociación de cofradías local que se afanan en ultimar los detalles en la iglesia de san Francisco, donde se oficiará la misa y posteriormente se celebrará la renovación del voto. El alcalde de la localidad tomará la palabra y, desde el altar del templo, hará público el juramento de fidelidad de todos los bujalanceños a la Inmaculada Concepción. Tras lo cual la imagen sale en procesión acompañada por un nutrido cortejo de autoridades civiles y eclesiásticas, representantes de hermandades, cofradías locales y devotos. En El Carpio la Virgen sale en procesión a hombros de las mujeres que conforman la agrupación Hijas de María; junto a la parroquia y al ayuntamiento, son las encargadas de organizar y financiar los actos. El momento culminante del ritual se desarrolla en la Plaza del Triunfo, ante el monumento a la Inmaculada, cuando, tras la renovación del voto, un numeroso grupo de niños y niñas realizan una ofrenda floral a la patrona. Entre las transformaciones más sustanciales hacer hincapié en la pérdida de relevancia en el seno de la comunidad, fundamentalmente en el caso de la localidad de Bujalance, donde la Inmaculada comparte patronazgo con Santa Teresa y devoción con la imagen de La Milagrosa.

Diciembre.
La celebración en ambos municipios tiene lugar invariablemente el día de la 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada.