Imagen

Finalizada
Con motivo de la celebración del día de san Blas, el tres de febrero, los vecinos de la localidad cordobesa de Aguilar de la Frontera acuden a las parroquias para que el santo bendiga sus roscas de pan, a las que le atan un lazo que se conoce como "bulili". Tras la bendición, a la que acuden fundamentalmente niños, es costumbre atar al cuello las cintas, ya que se cree que protegen del mal de garganta. No habiendo sufrido transformaciones sustanciales, tan sólo sutiles variaciones en su proceso de elaboración, en esta festividad participan fundamente madres y niños. De igual modo, son muchos los colegios que celebran la festividad de san Blas llevando al colegio roscos bendecidos.
Febrero.