Las fiestas en honor a la Virgen de la Consolación comienzan la jornada del tres con la celebración de un oficio religioso, "el perdón comunitario", en el que el cura del pueblo y varios sacerdotes venidos de pueblos vecinos confiesan a todos aquellos fieles que así lo deseen. Tras estas concurridas confesiones se lleva a cabo un acto de absolución general. El día siguiente, cuatro de octubre, tienen lugar los actos más importantes de las fiestas. Estos comienzan con una ofrenda floral a la Virgen hacia las seis de la tarde seguido de una misa en honor de la patrona como preludio a la procesión que recorrerá las calles del pueblo, acompañada por la agrupación musical de la propia hermandad. La procesión recorre las principales calles de la localidad. La imagen de la Virgen de la Consolación, de pequeñas proporciones, es portada por veinte hermanos voluntarios. El cortejo procesional que la acompaña desfila tras las andas y cuenta con la presencia del párroco, el alcalde y la hermana mayor de la Hermandad de la Ntra. Sra. de la Consolación. Una vez finalizado el recorrido se lleva a cabo el lanzamiento de una salva de cohetes que anuncian el comienzo de diversas actividades lúdicas y de una tómbola benéfica.

Septiembre.