Entre las siete y las ocho de la tarde empiezan a prender fuego las primeras candelas.

Una de las más grandes es la de la Plaza de Santo Domingo, donde este año se ha organizado también un tostón de castañas cuyos ingresos han sido donados a un proyecto solidario en Nicaragua y donde ha acudido también una cadena de televisión para la cual se han cantado villancicos mientras se encendían los primeros rehiletes.

El desarrollo de la fiesta consiste básicamente en reunirse alrededor de las candelas, y en encender los rehiletes, las varitas de hojas que una vez prendida se hacen girar con gran fuerza para crear unos círculos de fuego realmente fascinantes.

Niños, jóvenes y mayores, hombres y mujeres, todos intentan encender y girar su rehiletes, en diferentes momentos de la fiesta que puede durar hasta la madrugada. Las candelas suelen encenderse en diferentes barrios de pueblo, algunas de ellas son más tradicionales, donde se reúnen familias y vecinos de toda la vida, como es el caso de la Calle Alegre, mientras que en otras los organizadores de la candela son jóvenes, en algunos casos ligados a un bar.

La fiesta dura hasta la noche. Alrededor del fuego y de los rehiletes, se asan chorizos, costillas, se fríen buñuelos y se toma mosto o aguardiente.

Diciembre. Fiestas de la Inmaculada.