La zona de Marroquíes es conocida por sus restos arqueológicos desde mediados del siglo XX. En 1956, en la zona denominada Marroquíes Altos, se descubren unos enterramientos en cuevas artificiales que se datan de la edad del Bronce. Sin embargo, más al norte, la zona denominada Marroquíes Bajos, hasta finales del siglo XX, era una amplia área de huertas con más de 500 ha que se había mantenido como tal, gracias a que las vías ferroviarias suponían un límite que contenía la expansión urbana de la ciudad.

Por la magnitud e importancia de los hallazgos arqueológicos, la Junta de Andalucía a través de la Consejería competente en materia de Cultura, decidió en 1995 incluir a la Zona Arqueológica de Marroquíes Bajos (ZAMB) en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz con el mayor nivel de protección que la ley andaluza permite.

Las intervenciones arqueológicas en la Zona Arqueológica de Marroquíes Bajos se han ido desarrollando desde el año 1995 hasta la actualidad. Primero, excavando viales y jardines, y más tarde solares urbanizables, desde viviendas unifamiliares a urbanizaciones y grandes áreas de titularidad pública destinados a colegios, centro de salud, etc.

Publicar, difundir, dar acceso a los resultados es una obligación básica para los equipos de investigación. Primero, porque hace público lo que se obtiene en nombre de un interés social (con fondos públicos o privados) y segundo, porque lo publicado es algo siempre discutible y sobre todo utilizable.