Paseando por Málaga
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En este plan os proponemos dar un paseo por su cultura y que te pierdas por sus calles y plazas. Te damos pistas para que conozcas mejor una ciudad verdaderamente genial.
Málaga es uno de esos destinos culturales, que con más de 3.000 años de historia, cumple perfectamente con su papel de ciudad cosmopolita, de capital de la Costa del Sol y de ciudad cuna de artistas.
Actualmente la ciudad cuanta con 40 museos -algunos de ellos de alto nivel internacional-, por lo que a esta ciudad se la considera como una auténtica 'Ciudad de Museos'. Os proponemos dar un paseo por su cultura, que te pierdas por sus calles y te quedes con lo mejor de una ciudad verdaderamente genial.
Recorrido:
Nuestro paseo por Málaga comienza en la popular calle del Marqués de Larios, una de las más importantes arterias comerciales de la ciudad por la que se llega en pocos minutos a la Plaza de la Constitución, el verdadero corazón del centro histórico de Málaga.
Desde aquí nos dirigimos a la zona oeste de la ciudad por la calle Compañía, donde encontraremos el Museo Carmen Thyssen Málaga.
Un Museo dedicado a la conservación, investigación y difusión de la Colección Carmen Thyssen con el fin de poner en valor la pintura española, en especial la del siglo XIX y principios del XX. Dicha colección prestada gratuitamente al Museo, presenta un rico conjunto de extraordinaria coherencia, que arranca con una serie de piezas de maestros antiguos, entre los que destaca la Santa Marina de Zurbarán, y continúa con una serie de capítulos que permiten establecer una sólida historia de los géneros que protagonizaron la pintura española del siglo XIX, con especial atención a la pintura andaluza. El paisaje romántico, representado por las obras de Genaro Pérez Villaamil o Manuel Barrón, evoluciona hacia la pintura costumbrista andaluza de los Domínguez Bécquer o Manuel Cabral Aguado Bejarano. La atención a las más genuinas costumbres españolas se transforma a lo largo del siglo XIX: el costumbrismo da paso a la pintura preciosista, de la mano de Marià Fortuny, de la misma manera que el género del paisaje se desarrolla desde el romanticismo hacia el realismo. Finalmente, las obras de Darío de Regoyos, Joaquín Sorolla, Hermen Anglada i Camarasa, Francisco Iturrino o Ignacio Zuloaga ejemplifican cómo el arte español de fin de siglo se integra claramente en los circuitos internacionales, constituyendo el colofón del rico y amplio recorrido que dibuja la colección.
Continuamos ahora buscando la calle Santa María que nos llevará a la Catedral de Nuestra Señora de la Encarnación. Acceder a la Catedral de Málaga tiene un coste general de 6€ (consultar precios y horarios). Situada enfrente de la plaza del Obispo, el templo es considerado una de las joyas renacentistas más valiosas de Andalucía.
La Catedral fue construida entre 1528 y 1782, donde anteriormente se encontraba la Mezquita Mayor. Serían los Reyes Católicos los encargados de realizar el levantamiento del templo, al poco tiempo de conquistar la ciudad en 1487. La Catedral de Málaga se compone de una estructura mayoritariamente renacentista, pero también aparecen elementos góticos y barrocos. Esto se debe a las influencias recibidas en su largo proceso de construcción. Será por 1588, tras haberse puesto en pie la cabecera y la sacristía, cuando Catedral sea consagrada.
Durante su construcción, el templo se vio envuelto en constantes interrupciones hasta bien entrado el siglo XVIII. Tras dos siglos de obras, en el año 1782, se concluyen por fin los trabajos de edificación. Pero a falta de terminar una de sus dos torres y numerosos elementos decorativos. Algunos creen que el dinero destinado a la finalización de estos elementos se utilizó para ayudar a los Estados Unidos durante su independencia. Aunque investigaciones deducen que el dinero se usó en el acondicionamiento del Camino de Antequera. Por este motivo, la Catedral de Málaga es conocida cariñosamente entre los malagueños como “La Manquita”.
Posee planta rectangular, y está compuesta por tres naves. Cabe destacar el Altar Mayor fechado en 1541. El coro es una de las partes más valiosas de la Catedral de Málaga, y fue la obra cumbre de la carpintería barroca. Es además uno de los trabajos más deslumbrantes del escultor Pedro de Mena, aunque en este también participaron otros artistas. Sobre los laterales del coro se encuentran los órganos de trompetería horizontal, mientras que el trascoro está presidido por un altar, con una Piedad de mármol. El realismo de las esculturas de Pedro de Mena para el coro, junto con su naturalismo, marcan la diferencia y su acercamiento a un barroca malagueño a destacar.
Además existe en su interior, un Museo Catedralicio, ubicado en las antiguas dependencias de la Sala Capitular. Este se divide en dos salones, y en ellos se pueden observar obras procedentes de distintos emplazamientos de la catedral. Existe también un museo al aire libre. Al que se accede por el Patio de los Naranjos y cuya entrada es totalmente gratuita. En éste espacio podemos contemplar un grupo escultórico de 8 cruces realizadas por el malagueño Jorge Rando. Importantes también las dos pesadas campanas (2 toneladas cada una) con más de 300 años de antigüedad que descansan bajo sus árboles. Además, podemos observar una preciosa escultura de la Virgen de la Victoria, patrona de Málaga.
Frente a la Catedral malagueña se localiza la Plaza del Obispo, con el Palacio Arzobispal (1762) caracterizado por su portada barroca; dicho espacio se puede visitar por 5€ y encontraremos en su interior: patio porticado, escaleras imperiales, capilla y jardín privado. La visita al Palacio también incluye colecciones permanentes de los fondos de la Diócesis de Málaga y exposiciones temporales.
Rodeamos la Catedral por su último tramo de la calle Santa María, donde podremos contemplar la majestuosa fachada isabelina del Sagrario, para avanzar por la calle Cister, y desembocar en el Palacio de la Aduana, hoy sede del Museo de Málaga.
Creado en 1972 por la unión del antiguo Museo Provincial de Bellas Artes (1913) y el Museo Arqueológico Provincial (1945), el actual Museo de Málaga es uno de los 63 museos españoles de titularidad estatal y gestión autonómica, en este caso transferida a la Junta de Andalucía en 1984. Finalmente, entre 1996 y 1997 se produce el cierre de las dos sedes del museo, tras iniciarse el proyecto de creación del Museo Picasso de Málaga
La nueva sede del Museo de Málaga, el Palacio de la Aduana, es un edificio de finales del siglo XVIII, y la expresión más rotunda del neoclasicismo en Málaga. Su ubicación, sus proporciones y su lenguaje arquitectónico lo convierten en un hito del paisaje urbano, y su aire de "modernidad" está en consonancia con el ambiente en el que se gestará el inicio del museo: la Málaga del siglo XIX. Compartiendo el edificio de la Aduana y el nacimiento de las colecciones un mismo espíritu innovador.
En 1997, más de 50 representantes de colectivos malagueños como asociaciones, fundaciones, colegios profesionales o sindicatos se suman la ciudadanía en una movilización sin precedentes bajo el lema "La Aduana para Málaga", reclamando el uso museístico del Palacio de la Aduana y su transformación para ubicar las dos secciones de Arqueología y Bellas Artes del Museo de Málaga. En 2005 el Gobierno Español y la Junta de Andalucía acuerdan finalmente el uso museístico de la Aduana, iniciándose los proyectos y actuaciones que lo harán posible.
El nuevo Museo de Málaga con 18.402 m2 construidos, es el museo estatal de mayor tamaño ubicado en Andalucía. Su nueva sede da respuesta a las necesidades expositivas, al tiempo que está preparada para acoger en sus instalaciones todos los servicios de un museo de siglo XXI. Además, su ubicación estratégica en el centro de la ciudad, junto a lugares tan emblemáticos como la Alcazaba, la Catedral o el Teatro Romano, convierten al Museo de Málaga en un lugar de encuentro y disfrute cultural.
Las colecciones de arte y arqueología, la decisión de completarlas con un almacén visitable o el uso de su patio como espacio abierto a la ciudad, en reconocimiento a esa reivindicación ciudadana, constituyen rasgos de la personalidad actual de este nuevo museo, un museo con historia pero que desde el 12 de diciembre de 2016, fecha de su apertura al público en el Palacio de la Aduana, emprende una nueva etapa.
Junto a la antigua Aduana se encuentra la escalera y punto de información para acceder (ya en calle alcazabilla) a la Alcazaba de Málaga, espacio singular que reúne en el mismo espacio: Alcazaba, Castillo Gibralfaro y Teatro Romano.
Alcazaba:
Construida entre los siglos XI y XV, fue el palacio fortaleza de los gobernantes musulmanes. Está emplazada sobre los restos de una anterior edificación fenicia a las faldas del monte de Gibralfaro, en un enclave privilegiado sobre la ciudad. El recinto alberga una interesante sala de exposiciones, donde se muestran materiales cerámicos de la Málaga musulmana.
Este palacio se comunica con el Castillo de Gibralfaro. Donde podremos visitar el Centro de Interpretación del Castillo de Gibralfaro, donde podemos encontrar a las puertas del polvorín una gran maqueta de la ciudad con la murallas defensivas que tenía en el siglo XVI, centrada en el Monte Gibralfaro y su falda, en la que se observa el Castillo, la Alcazaba y otras edificaciones de la zona como la Plaza de Toros, el Ayuntamiento, la Catedral o el Palacio de la Aduana.
La exposición recoge la historia del castillo a través de sus moradores. En las vitrinas se pueden observar maniquíes ataviados con los uniformes de la época. El primero de ellos es un alabardero del siglo XVI, al que le acompañan algunas armas y documentos. Representando el siglo siguiente se encuentra un arcabucero, una espada de lazo española y un plano de Málaga de 1693.
Los restos del Teatro Romano son visitables tanto a la salida de la Alcazaba, como en su centro de visitantes situado en calle Alcazabilla. Construido en el siglo I a.C. se mantuvo activo hasta el siglo III d.C. En anteriores veranos el teatro recupera su antigua función como espacio escénico para beneplácito de los veraneantes.
Ya en calle alcazabilla os recomendamos que os paséis por sus calles aledañas, incluso os sugerimos entrar en el bar El Pimpi, y reconocer el arte de este bar centenario, llegando así a la calle San Agustín, donde se encuentra el restaurado Palacio de Buenavista sede que albergar el Museo Picasso Málaga
El Museo Picasso Málaga está regido por la Fundación Museo Picasso Málaga. Legado Paul, Christine y Bernard Ruiz-Picasso, entidad que posee el pleno dominio sobre la Colección y los fondos del Museo y es propietaria del Palacio de Buenavista, sede de la institución.
La colección Museo Picasso de Málaga transmite el rigor y la capacidad creativa de un artista imprescindible para comprender la historia del arte occidental. El conjunto de obras, realizadas entre 1892 y 1972, abarca las innovaciones revolucionarias de su trayectoria, así como la amplia variedad de estilos, materiales y técnicas que dominó.
Una vez realizado este paseo por Málaga se nos quedan cosas en el tintero, espacios culturales que solo os detallamos como son la Plaza de Toros de la Malagueta, el Puerto de Málaga -donde os destacamos el Muelle1 cercano al Museo Pompidou Málaga-, y el Muelle2 donde se encuentra la sala de exposiciones El Palmeral de las Sorpresas, así como el Museo Alborania-Aula del Mar.
Enamórate de Málaga, una ciudad genial.
www.malagaturismo.com