100 años de investigaciones en la Necrópolis Ibérica de Tútugi

En agosto se inauguró una exposición sobre el yacimiento, que se puede visitar de forma permanente en el vestíbulo del Centro de Visitantes.

27-09-2018

La Necrópolis Ibera de Tútugi es un yacimiento arqueológico que se descubre alrededor de 1914 por el expolio de vecinos de Galera en busca de tesoros, lo que provocó la destrucción total o parcial de un buen número de sepulturas.
Posteriormente, Federico de Motos, con permiso de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, realiza algunas excavaciones entre los años 1916 y 1917, pero al continuar las expoliaciones y venta de objetos decide ofrecer la excavación de la necrópolis al Estado, que, por Real orden de fecha 12 de abril de 1918, hace ahora 100 años, nombró director de los trabajos al arqueólogo Juan Cabré.
Cabré realizó una planimetría donde señaló todas las sepulturas que se conocían en el yacimiento. En 1920 se publicó la memoria de estos trabajos.
Desde ese momento el yacimiento quedó abandonado hasta el año 2.000 en que se realizó una intervención para comprobar si todavía quedaban restos. A partir de esta intervención se comprobó que el yacimiento todavía podía ofrecer nucha información, por lo que se continuó excavando y restaurando sepulturas para, 7 años después, abrir el yacimiento al público.
El conjunto arqueológico de Tútugi se compone de una ciudad ibero romana situada en el Cerro del Real, junto al casco urbano de Galera, un santuario al sur  del oppidum y una necrópolis muy monumental.

La necrópolis de Tútugi se distribuye en tres núcleos cercanos al poblado. Los dos primeros y más extensos, se sitúan al Norte del poblado en la margen derecha del Rio Orce y el tercero en una pequeña cañada, denominada Cañada del Metro, a 500 metros al Este del poblado en su misma margen del río.
La necrópolis llega a su apogeo en los siglos IV-III a.C teniendo algunas evidencias del siglo IV y V a .C.
El sistema de enterramiento es muy variado:
Destacan los túmulos artificiales que recubren una cámara de diversas formas. En Tútugi tenemos diversas variantes: de aljibe, cuadrangulares con pasillo, circulares y semicirculares con pasillo y con nichos. Suelen ser construidas en piedra o adobe o ambas a la vez.
Al interior, generalmente presentan las paredes  y suelos revocados de yeso, en muchas ocasiones con decoraciones realizadas en rojo, el color funerario ibérico, y negro. También en su interior encontramos bancos y nichos.
Las tumbas más sencillas son hoyos practicados en el suelo, a veces revocados con yeso , y cistas de piedra donde se introducen las urnas. Éstas pueden ser vasijas cerámicas, que se introducen en oquedades del terreno o cajas de piedra.

El Centenario del inicio de las  investigaciones en el yacimiento se va a conmemorar con diversas actividades, en primavera se programó una exposición sobre la mujer ibera, se han programado también conferencias sobre distintos aspectos de la necrópolis, durante el mes de agosto se han programado una serie de jornadas de puertas abiertas, también un desfile para el hermanamiento entre Cástulo y Tútugi y una visita-taller para disfutar el patrimonio en familia. La exposición sobre el yacimiento inaugurada también en el mes de agosto se puede visitar de forma permanente en el vestíbulo del Centro de Visitantes.

José Manuel Guillén Ruiz,
Coordinador RECA Granada