Se entiende por "objetivos propios para la mejora del rendimiento escolar y la continuidad del alumnado en el sistema educativo" aquellos propósitos generales que cada centro, en función de su contexto singular, se plantea en su proyecto educativo mediante formulaciones explícitas para alcanzar logros evaluables referidos a los diferentes ámbitos de evaluación y mejora.

Estas formulaciones explicitas afectan e inciden en todo caso en la mejora del rendimiento escolar, así como en la continuidad del alumnado en el sistema educativo en aquellos centros que imparten enseñanzas distintas a las obligatorias.

Para la actualización de estos objetivos propios previstos en el proyecto educativo, en coherencia con el proyecto de dirección, resulta fundamental tanto el diagnóstico de necesidades que realiza la dirección en su proyecto a partir del análisis del contexto y situación de partida del centro, como la visión del centro que se pretende conseguir.

Por su parte, la concreción de los elementos, ámbitos procesos y resultados, a mejorar anualmente, determinan para cada curso escolar los objetivos de mejora del centro, que serán la base sobre la que diseñar y desarrollar los Planes de Mejora para la consecución a medio plazo de los objetivos propios del centro.