1.1 - INCIDENCIA DEL CLIMA SOBRE LOS CULTIVOS Y LA GANADERÍA
La situación meteorológica de la semana estuvo caracterizada por la
influencia de una borrasca de mediana intensidad que ha afectado a toda
La Comunidad en forma de chubascos en ocasiones tormentosos pero con
unos registros de lluvias muy irregulares según zonas. Se ha producido
además un ligero descenso de las temperaturas y los vientos soplaron en
general del Oeste o Suroeste.
Estas lluvias, aunque han llegado algo tarde en algunas zonas, en
general van a favorecer mucho a los cultivos herbáceos de toda
Andalucía.
Hay extensas zonas, sobre todo en las provincias de Cádiz y
Sevilla, donde el cereal está terminando de completar su ciclo y en
esos campos el agua ya no va a mejorar mucho al cultivo. No obstante en
otras zonas donde está más retrasado el agua caída puede significar un
buen alivio de cara a los rendimientos que se lleguen a obtener.
La remolacha azucarera ha sido uno de los cultivos más
beneficiados ya que se encontraba en un momento muy crítico y con las
lluvias parece que se pueda recuperar bastante.
El girasol y los garbanzos también se han visto favorecidos por el
agua que facilitará la nascencia y el desarrollo en los primeros
estadios.
El algodón de secano prácticamente tiene asegurada su nascencia
con el agua caída y el de regadío prosigue con su evolución normal.
Todos los cultivos leñosos (almedro, vid, frutales de hueso, etc.)
se ven también en general favorecidos por la lluvia, aunque los
tratamientos fitosanitarios se vieron interrumpidos esta semana.
La humedad y el descenso de las temperaturas podrían perjudicar al
fresón de Huelva que está ahora mismo en plena recolección pero hasta
el momento el cultivo ha continuado su ciclo sin problemas.
En cuanto al estado de las dehesas hay que anotar que a estas
alturas de la primavera, las lluvias escasas e irregulares de la semana
han representado solo un alivio parcial y pasajero de los pastos.
Tendría que haber más frentes lluviosos para que la situación se
normalizara y hubiera abundancia de pastos hasta el verano.