El ayuntamiento de Guadix se levanta en un enclave histórico, fruto de la remodelación urbanística del tejido urbano musulmán que se lleva a cabo tras la conquista. Apoyándose en la existencia previa de un espacio público tan significativo como el zoco, se plantea la construcción de una plaza mayor -con todas sus connotaciones formales- a la que vierten las Casas del Cabildo y el Balcón del Corregidor, este último en una posición fronteriza entre el espacio civil -la Plaza Mayor- y el eclesiástico -la plaza de la Catedral- participando al mismo tiempo de las actividades laicas y religiosas.
El edificio original, construido en época de Felipe II, sería lamentablemente destruido en los incendios de 1936. Posteriormente y sobre el mismo solar la Dirección General de Regiones Devastadas levantaría, en 1944, un nuevo ayuntamiento, obra del arquitecto Francisco Robles Jiménez. A él se debe la reconstrucción del llamado Balcón de Corregidores, que se convertiría en la fachada del nuevo edifcio, aportando a las Casas Consistoriales una cierta apariencia "histórica".
El balcón original, destruido casi totalmente en los incendios, se reconstruye entre 1604 (Juan Caderas de Riaño) y 1606 (Juan de Freyla). Era una tribuna de espectáculos, de corte clásico, que ocupaba el frente opuesto de la plaza. Con una sola crujía y doble arquería abierta, la baja con arcos escarzanos y la superior de medio punto, se remata con tres espadañas con el escudo real, el del corregidor y el del municipio. En su entablamento se desarrolla una extensa leyenda que incluye los nombres del Corregidor, el Alcalde Mayor y otros cargos responsables del gobierno de la ciudad en las fechas de su construcción. su reconstrucción se ajustó fielmente al modelo original aunque con la adición de una arcada más.
Desde entonces no se habían producido intervenciones reseñables en el edificio, por lo que era evidente que el ayuntamiento requería una modernización funcional. Y este fue el principal objetivo de una intervención en la que se reordenaron y racionalizaron las necesidades municipales, poniendo en sintonía los requerimientos funcionales y los valores del propio edificio.
Una de las decisiones más significativas del proyecto fue la recuperación del patio central como elemento fundamental y organizador del conjunto. Situado inicialmente por debajo de la cota de la calle y de la del resto de dependencias de planta baja, se elevó al nivel de éstas, cubriéndose además con una montera de vidrio.
En la galería de entrada se abrió un hueco que acentuaba el carácter unitario de esta pieza, la tiempo que se introducía una continuidad del espacio, en sentido vertical, en la que participaban todas las plantas, convirtiéndose este ámbito sobre el vestíbulo en el elemento cohesionador de la actividad del Ayuntamiento. Este hecho se acentuó aún más mediante la utilización de la luz natural cenital que crea un eje luminoso, paralelo al patio central, que enfatiza el carácter lineal de esta pieza hacia la escalera de ingreso a las plantas superiores.
Otra decisión importante fue el cambio de ubicación de la escalera, antes a codo con el vestíbulo y ahora situada en la crujía del fondo, lo que permite una importante clarificación de las circulaciones y de la organización funcional. En este sentido, también se ha colocado en planta baja los departamentos administrativos que demandan un acceso más directo al ciudadano; en planta primera, la planta noble, se sitúan las estancias de carácter político y de protocolo y en una ampliación desarrollada en la segunda planta, las oficinas técnicas y de obras.
El salón de plenos, pieza fundamental del edificio, ha sido rediseñado en cuanto a proporciones y volumen, dotándolo de una doble altura al recuperar los planos inclinados de la cubierta. Se ha buscado especialmente el ennoblecimiento de esta pieza, a lo que ha contribuido la elección de los materiales, como los chapados de madera de arce moteado hasta media altura de los paramentos verticales, o la disposición de unos paneles de duelas de roble sobre bastidores curvos en el entrevigado de la cubierta.