Nota Divulgativa

Andalucía, 20 de julio de 2006.

Según se desprende del estudio Andalucía. Dependencia y solidaridad en las redes familiares que publica el Instituto de Estadística de Andalucía, hay en nuestra Comunidad algo más de 142.000 personas de más de 80 años con necesidades básicas y 115.000 con necesidades vitales, es decir, que necesitan ayuda para comer o para su aseo personal. En total, algo más de 640.000 personas de todas las edades declaran necesitar algún tipo de ayuda.

En las familias, las mujeres dedican el doble de horas que los hombres a cuidar a los dependientes. Por otra parte, son ellas sobre todo las que atienden las necesidades más vitales y en general prestan la ayuda más íntima y se ocupan de las tareas del hogar de éstos. Entre los cuidadores que atienden necesidades básicas y relacionadas con el hogar, el 70% son mujeres, mientras que los hombres ayudan en mayor proporción (un 43%) a la movilidad del familiar dependiente (dentro y fuera del hogar).

Fundamentalmente, las cuidadoras y los cuidadores andaluces prestan ayuda a sus familiares por razones afectivas (un 65,5% de los casos) y por sentido de la responsabilidad (un 34,4%). Las mujeres aducen estas motivaciones en una proporción mayor que los hombres.

Los datos anteriores provienen de una macro-encuesta representativa de cada una de las ocho provincias andaluzas realizada a domicilio a un total de 10.000 personas como parte esencial del proyecto sobre Redes familiares en Andalucía, puesto en marcha por el Instituto de Estadística de Andalucía. Este proyecto supone una aproximación a un aspecto de la realidad social escasamente conocido y analizado hasta ahora, tanto en esta región como en otras y en el país en su conjunto. También en Europa es un tema nuevo, aunque hay ya algunas experiencias y proyectos planteados desde esta perspectiva.

En el lenguaje común, la familia designa el conjunto formado, en primer lugar, por el núcleo de padre, madre e hijos que ocupa generalmente la misma vivienda, pero también por los abuelos, los hermanos, los nietos y toda una serie de parientes más o menos lejanos como cuñados, primos, etc. que no viven juntos. Es lo que se ha dado en llamar “red familiar” para distinguirlo del "hogar" que son los que ocupan la misma vivienda.

El concepto de red familiar es importante para analizar fenómenos sociales de creciente importancia. Las relaciones de ayuda y solidaridad entre abuelas, abuelos y nietos, hijas, hijos adultos y padres mayores mantienen su vigencia e incluso la aumentan como recurso ante nuevas situaciones como la incorporación de las madres a la actividad laboral o la prolongación de la vida a edades tardías.

Uno de los objetivos del Instituto de Estadística de Andalucía al acometer este proyecto es incorporar en la práctica estadística un concepto más amplio de familia, que permite un acercamiento más rico a diversos fenómenos sociales y en particular al problema de la atención a las personas dependientes, de gran trascendencia hoy y en el futuro. No existe, en la actualidad, ninguna fuente estadística que ofrezca de forma sistemática información rigurosa sobre unas estructuras y unas relaciones familiares que afectan la vida cotidiana de muchos ciudadanos y que inciden en las necesidades y demandas de políticas públicas. Un simple ejemplo: se sabe del papel que desempeñan actualmente los abuelos (sobre todo las abuelas) cuidando a sus nietos para que las madres puedan asumir un trabajo remunerado, pero no sabemos siquiera cuántos abuelos y abuelas hay en España o en Andalucía. La Encuesta que aquí se presenta viene a cubrir esta deficiencia para Andalucía y sus provincias. Gracias a ella se puede cuantificar algo tan sencillo en apariencia cómo que hay 1.557.000 personas con nietos en Andalucía, de las cuales hay casi 900.000 son abuelas. También nos dice que hay 3,9 millones de madres y casi 3 millones de padres...

Además de aportar información inédita sobre la sociedad andaluza, a partir de ella se podrán diseñar indicadores y formas de recogida de información que van a permitir, en un futuro próximo, difundir con regularidad datos sobre una realidad muy presente en la vida de muchos ciudadanos pero hasta ahora prácticamente ausente de la Estadística oficial.

La encuesta ofrece información sobre la estructura familiar. En primer lugar sobre la "familia-hogar" que refleja en su composición y tamaño los efectos de la evolución demográfica y de la tendencia a que los mayores se mantengan en su propio domicilio y, al contrario, que los jóvenes permanezcan más tiempo en el hogar paterno.

Se ha recogido también en esta encuesta una importante información sobre la “red familiar básica”, grupo que incluye a todos los ascendientes y descendientes directos del entrevistado, además de los hermanos y el cónyuge. Forma el eje estructural de articulación de las redes familiares, en la que se produce la mayoría de intercambios materiales y afectivos, aunque en ocasiones juega un papel importante la “red familiar ampliada”, que incluye a todos los restantes parientes, para también se ha recogido información sobre suegros/as, cuñados/as, yernos/nueras, tíos/as, primos/as y sobrinos/as.