La alta diversidad que alberga Doñana configuran un escenario inmejorable para afrontar estudios de investigación que permitan profundizar en la naturaleza e impactos del cambio climático a escala regional y del cambio global como fenómeno de mayor complejidad, que alcanza a los procesos biológicos y los sistemas ecológicos.
Doñana celebra los veinte años de su declaración como Parque Nacional, y los diez como Parque Natural. Durante este periodo de tiempo se ha logrado ampliar la superficie protegida, alcanzándose las cien mil hectáreas, y se han recibido los reconocimientos más importantes en materia de conservación, como hechos más destacados.
En relación con todo lo anterior, la Consejería de Medio Ambiente ha invertido este año 29 millones de euros, de los que 6,3 millones se destinan a actuaciones para la conservación de su biodiversidad; 5,6 millones para obras de mejora y adecuación de las infraestructuras; nueve millones para la dinamización de la economía y el empleo; y tres millones para el desarrollo de la actividad científica e investigadora. En estas tareas de investigación colaboran el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, a través de la Estación Biológica de Doñana, así como la comunidad universitaria. Así, en 2009 se han puesto en marcha un total de 69 proyectos de investigación, a los que hay que sumar el centenar que se iniciaron en 2008.
Por último, otro dato destacable de estos veinte años de Doñana como espacio natural protegido es que cuenta ya con la Carta Europea de Turismo Sostenible, con la que operan más de una veintena de empresas dedicadas al turismo de naturaleza que prestan servicio anualmente a más de 150.000 visitantes.
En el fomento del turismo de naturaleza destaca también la apuesta por el uso público ordenado de este enclave, con un total de 36 equipamientos. Gracias a ello se ha doblado la media anual de visitantes a Doñana, pasando de los 200.000 visitantes anuales de la década de los ochenta a los más de 400.000 que se reciben en la actualidad.