Este proyecto piloto, que tiene un coste de un millón de euros, se está realizando en una parcela de 1.800 metros cuadrados, de las 1.200 hectáreas que ocupan las balsas, por entender que en ella se encuentra el suelo más representativo de toda la zona. Los trabajos consisten en mantener los fosfoyesos bajo tierra, inactivos, cortando las vías de dispersión de cualquier contaminante que contenga este residuo, ya sea por aire, por agua o por contacto.
Paralelamente a la ejecución de la obra, cuyo objetivo es revelar la mejor propuesta de regeneración, el equipo técnico repasó todos los pormenores de la ejecución, especialmente lo concerniente a los ensayos de calidad de los materiales que se emplearían en las distintas capas de las zanjas filtrantes, y se procedió a la recogida de muestras aprovechando los primeros decapados de los horizontes superficiales.
De este modo, el 'Proyecto piloto de recuperación de las balsas de fosfoyesos en Huelva' permitirá realizar unos ensayos en parcelas de campo, en las zonas de la ría de Huelva, de tal forma que podrán evaluarse de manera real los distintos tratamientos y técnicas que se deberán emplear en la descontaminación y regeneración de la zona. Asimismo, el objetivo final de los trabajos será la redacción de una propuesta para la recuperación integral del área ocupada por los depósitos de fosfoyesos, basada en un riguroso diagnóstico científico-técnico.
De esta manera, se pretende reconducir el deterioro ambiental y paisajístico de la zona a una situación sostenible, acorde con la naturaleza y características del entorno, integradora de posibles soluciones alternativas y que sirva de base científica para la redacción del proyecto técnico de ejecución.