Actualmente, Grazalema dispone de una Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) con 25 años, de forma que es necesaria la construcción de una nueva instalación que haga posible que el agua residual llegue al río Guadalete con niveles de calidad adecuados. Además de la construcción de la nueva depuradora, se reparará el tramo inicial del colector que conduce las aguas residuales del municipio a la planta de tratamiento mejorando la actual situación.
La Consejería ha dado el visto bueno a la redacción del proyecto, por importe de 69.507,90 y con un plazo de ejecución de seis meses. Una vez que se encargue mediante concurso público y se redacte, el siguiente paso será la contratación de las obras, cuyo importe se estima en cerca de 2,3 millones de euros.
El proyecto de Benaocaz se encuentra en el mismo punto de tramitación y su coste se estima en 70.210 euros. Este municipio no dispone de ningún sistema de aguas residuales y vierte de forma directa a distintos cauces. Otro de los problemas que han llevado a la Consejería de Medio Ambiente a priorizar esta actuación es que en la actualidad uno de los puntos de vertido provoca problemas de olores.
Al igual que en el caso anterior, el proyecto, una vez adjudicado, debe de estar terminado en medio año. El importe de las obras que se ejecutarían posteriormente se estima que alcance los dos millones de euros.