El cierre provisional de estadística a 5 de octubre refleja que el 78,6% de las actuaciones del dispositivo (394) quedaron reducidas a conatos -siniestros que no alcanzan la hectárea de superficie afectada-, lo que consolida una vez más la rápida y eficaz respuesta del plan INFOCA para atajar la gran mayoría de las intervenciones en tiempo breve y con resultado favorable.
La gran mayoría de la superficie afectada, un 89,3% (619,4 ha) se corresponde con suelos de matorral, un tipo de vegetación de rápida regeneración natural, siendo tan solo un 10,6% (73,5 ha), la superficie arbolada afectada en 2010 por incendios.
La campaña de extinción de 2010 se salda, además, con un balance que no incluye ningún gran incendio forestal -que son aquellos que superan las 500 hectáreas de vegetación afectada-, mientras que el mayor siniestro registrado hasta el momento, el de Huércal-Overa, supuso la afección de 57,2 hectáreas. Solo seis siniestros en esta campaña han superado las 25 hectáreas, mientras que ninguno ha sobrepasado las 100. Por provincias, Almería es la que ha contado con mayor superficie afectada por incendios, con 250,3 hectáreas, mientras que Sevilla ha sido la que menos, con 23,8.
Díaz Trillo subrayó en su intervención que la mano del hombre sigue estando detrás del origen de la mayoría de los incendios, ya sea por intencionalidad (con un 23,2% de los casos) o por negligencias, con un 22,6%, si bien ha destacado el aumento de la implicación y concienciación social respecto a esta problemática, sobre todo en la colaboración prestada en la detección temprana de incendios a través del teléfono único de Emergencias 112, a través del cual se han activado 213 actuaciones del dispositivo.
Por tanto , la rápida respuesta del dispositivo, junto con la implicación social y las medidas de prevención de incendios desarrolladas por el INFOCA son las claves, según el consejero, para explicar los resultados de esta campaña.
El dispositivo INFOCA, con un presupuesto en 2010 de 185 millones de euros, ha destinado el 60% de estos fondos (111 millones) a su plan de prevención, que ha incluido no solo el tratamiento y manejo de la vegetación y mantenimiento de los cortafuegos, sino las acciones dirigidas tanto a propietarios particulares de fincas, administradores de infraestructuras, colectivos específicos, ayuntamientos, comunidad educativa como a la sociedad en general.
En la faceta de extinción, la mejora de los recursos se ha centrado en la inauguración del nuevo Centro de Defensa Forestal (CEDEFO) de Carcabuey o el inicio del proyecto para la ampliación de las helipistas de tres CEDEFO en la provincia de Jaén.