El largo periodo de tiempo que han tenido agua las lagunas estacionales más grandes (que no se secaron durante todo el año pasado), así como las lagunas permanentes, ha permitido una evolución muy positiva de estos ecosistemas acuáticos en los dos últimos años. Esta disponibilidad de agua y de alimento en las lagunas han provocado un crecimiento en el número de aves.
Hay que destacar el espectacular incremento de aves registrado este año respecto al anterior en la Reserva Natural Laguna de Conde o Salobral, donde se ha pasado de 980 a 4.192 individuos. Además, esta laguna ha pasado de albergar quince especies en 2011 a acoger diecinueve este año. Entre ellas, destaca la malvasía cabeciblanca, una especie en peligro de extinción emblemática de los humedales del sur de Córdoba, cuya población invernante ha pasado en esta laguna en solo un año de 26 a 94 individuos, mientras que su presencia en los humedales se ha incrementado de 61 a 169 ejemplares entre 2011 y 2012.