Esta designación es un reconocimiento internacional al patrimonio geológico del parque y se traduce en el impulso del geoturismo como una herramienta para reforzar la economía del territorio. Esta consideración conlleva, más allá de los valores geológicos, una visión integradora de los valores naturales y culturales y requiere la implicación de la población local.
Andalucía apuesta firmemente por la protección y puesta en valor de la geodiversidad para lograr un desarrollo sostenible tal y como se recoge en la Estrategia Andaluza de Gestión Integrada de la Geodiversidad.
Entre los requisitos que debe cumplir un espacio para su designación se incluye contar con una extensión suficiente para un desarrollo económico y territorial conjunto, así como contar con lugares geológicos de singular importancia en términos de calidad científica, rareza, valores estéticos y educacionales.