Sevilla (septiembre de 2006). La Junta de Andalucía ultima la puesta en marcha de dos nuevos centros de cría en cautividad del lince ibérico, ubicados en Jaén y en Córdoba, que se unirán al existente en El Acebuche, en el Parque Nacional de Doñana.
Ambos centros de cría del lince acogerán ejemplares del centro de El Acebuche, donde ya viven diecisiete linces -diez hembras y siete machos- y que ha logrado cinco nacimientos en cautividad en los dos últimos años, tras más de un lustro de investigaciones.
El centro de cría en cautividad de La Aliseda, ubicado en Santa Elena, en el Parque Natural Despeñaperros, comenzará a funcionar antes de finales de 2006 y será mucho más extenso que el de Doñana, con jaulas de unos 2.500 metros cuadrados por ejemplar.
El segundo centro se construye en una zona de la campiña cordobesa y comenzará a funcionar en 2007.
Los nuevos centros seguirán las recomendaciones científicas de que la reproducción en cautividad del lince se debe desarrollar en zonas distintas a donde sobreviven ejemplares en libertad, para diversificar las poblaciones y evitar que una epizootia (epidemia) o un accidente acabe con todos los animales. El traslado de linces hasta los centros de La Aliseda y de la campiña cordobesa atenderá igualmente las directrices de la directora del programa de cría en cautividad, Astrid Vargas.
Curso de conservación ex situ
Pese a la creación de estos dos centros, el director general de Gestión del Medio Natural de la Consejería de Medio Ambiente, José Guirado, destacó en la inauguración de un curso sobre la conservación ex situ del lince que el principal objetivo de la Junta de Andalucía es la cría en libertad de este felino, que prevalecerá sobre la cría en cautividad y a la que va a seguir destinando el mayor porcentaje de su presupuesto. El objetivo de la década actual es salvaguardar las poblaciones viables existentes en la actualidad y emprender la recolonización de territorios que el lince habitaba hace años.
El subdirector general de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, Miguel Aymerich, presente en la inauguración del curso, coincidió con Guirado en que la cría en cautividad supuso un seguro de vida para evitar la extinción del lince cuando se encontraba en una situación dramática. Ahora, señaló, lo importante es aumentar su población para volver a colonizar territorios linceros.
El copresidente del grupo de especialistas en felinos de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), Urs Breitenmoser, recordó que la conservación del lince no es sólo relevante para España sino algo muy importante también para toda la comunidad conservacionista europea.