Sevilla (septiembre de 2006). El Consejo de Gobierno andaluz ha acordado imponer una sanción de 240.000 euros a los titulares de la finca Balsas Blancas, situada en el término municipal de Almería, por la roturación y el desmonte de 36,9 hectáreas de terrenos forestales sin la preceptiva autorización de la Administración ambiental. Esta infracción, denunciada en 2004 por agentes de Medio Ambiente, está catalogada como muy grave por la normativa autonómica en materia forestal.
Del total de hectáreas afectadas, 29,2 se incluyen en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar como zonas consideradas ecosistemas excepcionales. Este hecho se ha tenido en cuenta como agravante en la imposición de la sanción, al igual que la intencionalidad y la especial incidencia del daño causado (3,7 hectáreas son irrecuperables y 25,5 requerirán veinte años para su regeneración).
Junto con la sanción económica, el Consejo de Gobierno también ha acordado imponer como obligación adicional a los infractores la repoblación de todos los terrenos que se puedan recuperar, conforme a un plan técnico que deberá ser presentado en el plazo de dos meses.