Madrid (mayo de 2008). En la reunión de la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente celebrada el 30 de mayo, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino acordó con las comunidades autónomas la distribución de más de 66 millones de euros para la protección del entorno y actuaciones en los parques nacionales. Con estos fondos se financiarán, entre otras medidas, la prevención de incendios forestales, la Red Natura 2000, el aprovechamiento de la biomasa forestal y la recuperación de especies en peligro de extinción.
La Red de Parques Nacionales conforma un conjunto de espacios singulares, que suponen el 0,66 por ciento del territorio nacional, declarado de interés general del Estado, que incluye los elementos más singulares y simbólicos de la naturaleza española. Con objeto de subvencionar actuaciones en sus entornos, se han distribuido un total de 13.885.030 euros entre los catorce parques nacionales.
En Andalucía, la cantidad que han recibido los parques nacionales de Doñana y Sierra Nevada ha sido de 3.951.037,03 euros, esto es, el 27,89 por ciento respeto a los otros territorios.
Las subvenciones se destinan a entidades, particulares, ayuntamientos, mancomunidades y empresas de estos espacios protegidos con el objetivo de impulsar su desarrollo socioeconómico y la conservación de su patrimonio natural. Además, van dirigidas a fomentar iniciativas tanto privadas como públicas orientadas a la conservación y restauración del medio natural en estos enclaves y al fomento de actividades económicas relacionadas con la prestación de servicios, atención a los visitantes y turismo o comercialización de productos naturales y artesanales.
En los últimos años, las actuaciones que se han venido subvencionando han estado relacionadas con la modernización de las infraestructuras urbanas y rurales; proyectos de divulgación de los valores e importancia de los parques entre la población local y del entorno; actividades de formación y sensibilización en materia medioambiental; eliminación de impactos, tanto ambientales como culturales; preservación de prácticas y usos tradicionales que sean compatibles con los fines de los parques; y mantenimiento de las construcciones y arquitectura propias de la zona, especialmente aquellas que tienen un valor histórico-artístico.
Protección y mejora del medio natural
Considerando la distribución de los fondos destinados a la protección del medio, Andalucía obtendrá subvenciones por valor de 8,5 millones de euros. Estos fondos se orientarán al desarrollo de programas de protección y mejora del medio natural, siendo esta comunidad la que más recursos ha logrado.
En concreto, Andalucía percibirá 3.8189.000 euros para la mitigación de la desertificación y la prevención de incendios; 1.782.000 euros para la Red Natura 2000, con los que se financiarán actuaciones tendentes a la conservación y la restauración de los hábitat y especies de interés comunitario; 1.905.000 euros para impulsar la utilización energética de la biomasa forestal; 443.427 euros para financiar la elaboración de planes de defensa en zonas de alto riesgo de incendio forestal; 60.977 para la corrección de tendidos eléctricos peligrosos para la avifauna, y 519.288 euros para los planes de recuperación de especies en peligro de extinción.
Para toda España, la Sectorial acordó la distribución de 52.190.870 euros, cantidad con la que se subvencionarán actuaciones dirigidas a la mitigación de la desertificación y prevención de incendios forestales, para la Red Natura 2000, el aprovechamiento de la biomasa forestal residual y otras acciones relacionadas con la Ley de Montes. Estos fondos se utilizarán también para la conservación de especies en peligro de extinción y para la corrección de líneas eléctricas peligrosas para la avifauna.
Así, se han asignado 25.131.150 euros para la mitigación de la desertificación y la prevención de incendios, subvencionando con ello la realización de trabajos de protección y mejora forestal destinados a dificultar el inicio y la propagación del fuego, evitando o disminuyendo la extensión del incendio forestal y, por tanto, sus consecuentes procesos de erosión, desertificación y, en definitiva, la degradación de los ecosistemas.
En cuanto a la Red Natural 2000, se beneficiará de 8.377.050 euros, financiándose con esta cantidad actuaciones orientadas a la conservación y la restauración de los hábitat y especies de interés comunitario que dieron lugar a la designación de los lugares Natura 2000, así como de las especies y hábitat que requieran un sistema de protección estricta.
Un total de 12.000.000 euros han sido asignados para impulsar la utilización energética de la biomasa forestal, basándose el reparto, entre otros criterios, en la superficie forestal.
Para las acciones relacionadas con la Ley de Montes se han distribuido 2.662.500 euros, importe que se destinará a financiar la elaboración, por parte de las comunidades autónomas, de planes de defensa en zonas de alto riesgo de incendio forestal, áreas en las que la frecuencia o virulencia de los incendios forestales y la importancia de los valores amenazados hagan necesarias medidas especiales de protección contra los incendios.
Destinados a la corrección de tendidos eléctricos peligrosos para la avifauna, se han repartido 1.822.010 euros, distribución basada en la existencia de normativa, con rango de decreto autonómico, que prevea este tipo de actuaciones o planes de recuperación formalmente aprobados para las especies amenazadas que sufren mayor mortalidad en tendidos peligrosos, como son las águilas imperial ibérica, perdicera y pescadora y el alimoche canario.
Hasta 2.198.160 euros han ido a parar a los planes de recuperación de especies en peligro de extinción como el lince ibérico y el oso pardo pirenaico. Se incluyen también actuaciones para la conservación de otras especies catalogadas en peligro o vulnerable en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, con Estrategias Nacionales de Conservación aprobadas, como el visón europeo, el urogallo o el águila imperial.
Así, se presentó el Plan de Acción para la cría en cautividad del lince ibérico, que el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino impulsa en colaboración con Andalucía, Extremadura y Castilla La Mancha. El programa de cría para la conservación del lince ibérico plantea dos metas principales: establecer una población ex-situ viable desde el punto de vista sanitario, genético y demográfico, que permita el desarrollo de técnicas de reproducción natural y asistida, y preparar ejemplares de lince ibérico, adecuados desde un punto de vista etológico, sanitario, reproductivo y genético, para su reintroducción en la naturaleza en áreas de distribución histórica.
Se determinan para ello unos objetivos generales, de cada uno de los cuales se desgranan una serie de acciones específicas. Asimismo, se plantean unos objetivos específicos, cada uno asociado a las disciplinas de manejo, genética y demografía, reproducción, aspectos sanitarios, reintroducción y sensibilización. Estos objetivos específicos, junto a sus acciones asociadas, se detallan en capítulos concretos del Plan de Acción.
Estrategias nacionales de conservación
Por otra parte, el ministerio facilitó a todas las comunidades documentos sobre las estrategias nacionales de conservación de especies en peligro de extinción, como el lince ibérico y la lapa ferrugínea, así como el Plan de Acción para la cría en cautividad del lince ibérico y el programa de conservación ex situ del visón europeo en España. Estos documentos fueron facilitados a las distintas comunidades con objeto de que sus líneas directrices sirvan de base para la puesta en marcha de planes concretos de protección de estas especies en peligro de extinción.
La nueva estrategia para la conservación del lince ibérico, que actualiza la aprobada en 1999, tiene como finalidad aunar los esfuerzos de todas las administraciones competentes para lograr la recuperación de la especie. Los objetivos principales son establecer unos criterios orientadores para los planes de recuperación de las comunidades y sentar las bases para la coordinación de los distintos implicados en el proceso de recuperación del lince ibérico. La estrategia también establece metas numéricas concretas a lograr en un plazo determinado.
La meta final es contribuir a que el lince ibérico vuelva ser una pieza funcional del ecosistema donde habita, el monte mediterráneo. Para alcanzar esta meta se incide en el impulso que hay que dar a la investigación aplicada a la conservación del lince, y especialmente la encaminada a evaluar el resultado y la eficacia de la gestión que se va a realizar.
En la estrategia se ha establecido un proceso de tres pasos: la estabilización de las poblaciones actuales en Doñana y Sierra Morena; el aumento del número de linces que viven en las poblaciones existentes, hasta que al menos una de ellas supere los cincuenta linces vivos; y la creación de nuevas poblaciones.
Prevención y lucha contra incendios forestales
Se presentó un informe sobre las actuaciones de prevención y lucha contra incendios forestales durante 2007 y sobre la disposición de los medios aéreos y equipos de extinción para la campaña de este verano.
Durante el pasado año se han registrado un total de 10.915 siniestros, que han afectado a una superficie de 82.048 hectáreas, 73.114 hectáreas menos que en 2006.
Estas cifras constatan que 2007 ha sido el año con menor número de incendios y menor superficie forestal afectada de los últimos diez años.
También se explicó la disposición del operativo del Ministerio, compuesto por medios aéreos y equipos de extinción, para apoyo a las regiones en las labores de prevención y lucha contra los incendios forestales, durante la campaña de verano de 2008.