ESPACIOS NATURALES:
gestión unificada de los parques nacional y natural de Doñana y Sierra Nevada
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Un estudio confirma la buena calidad del aire en el entorno de Doñana
Sevilla (julio de 2008). Una campaña realizada por la Consejería de Medio Ambiente para evaluar la calidad del aire en el entorno de Doñana confirma que los niveles de contaminación registrados en los espacios naturales de Huelva no difieren de los niveles de fondo rural de otros puntos de la comunidad autónoma andaluza, alejados y sin influencia de grandes industrias cercanas. 

El estudio, realizado por la Junta de Andalucía para determinar la influencia de las emisiones industriales en el Espacio Natural de Doñana, ha permitido medir los distintos niveles de fondo del dióxido de nitrógeno (NO2), óxidos de nitrógeno (NOx), dióxido de azufre (SO2), ozono (O3), BTEX (benceno, tolueno, etilbenceno y xilenos) y  sulfuro de hidrógeno (SH2).

Así, el trabajo refleja que los niveles de SO2 han sido relativamente bajos, salvo en una zona de unos dos kilómetros alrededor de los polígonos industriales. En el caso del dióxido de nitrógeno (NO2), las emisiones son causadas no solo por la industria sino también el tráfico existente en la zona, ya que también se localizan valores altos de este contaminante en lugares alejados de los polígonos industriales, como la zona fronteriza con Portugal. En verano, los valores bajan respecto al periodo invernal, debido a que la alta radiación provoca la transformación de este contaminante en ozono (O3) . Los mayores niveles se registran al oeste de la zona industrial. Puntualmente, es posible encontrar estos valores en la zona limítrofe con Portugal y al oeste de Doñana. En relación con el benceno (BTEX), además de la zona industrial, es posible encontrar valores del mismo orden en zonas alejadas dentro de los espacios naturales.

Las mediciones realizadas sobre cada espacio natural reflejan que los valores medios anuales medidos en todos ellos no superan los valores límites legales de protección a los ecosistemas (20 mg/m3 de SO2), de protección a la vegetación  (30 mg/m3 de NOx), ni de protección a la salud humana ( 5 mg/m3 de benceno).

En definitiva, el estudio confirma que todos los espacios naturales están por debajo de los valores límites y que la contribución antrópica se sitúa por debajo del 35 por ciento a partir de unos ocho kilómetros de la zona industrial, yendo por debajo del cinco por ciento en zonas como Doñana.

Metodología

La técnica de medida que se ha utilizado es la denominada captación difusiva (tubos pasivos), que consiste en la utilización de un gran número de captadores que recogen información acerca de los niveles de contaminación existentes durante el periodo que dura el muestreo en los puntos en los que se encuentran ubicados.

Para que la campaña sea representativa de un año natural, se planificaron diez muestreos quincenales, distribuidos tanto en el periodo invernal como estival. Esta campaña de medición se ha centrado en 49 puntos de muestreo, repartidos por el Espacio Natural de Doñana (17), Reserva Natural Laguna del Portil (1), Paraje Natural Lagunas de Palos y Las Madres (1), Paraje Natural Marismas de Isla Cristina (1), Paraje Natural Marismas del Odiel (1), Paraje Natural Marismas del Río Piedras y Flecha del Rompido (2); y en otros lugares cercanos a los espacios naturales (26).

Los captadores se situaron en lugares representativos de la concentración de contaminantes -zonas industriales, núcleos urbanos o principales vías de comunicación- y entornos suficientemente alejados de cualquier fuente de contaminación. Los datos obtenidos se remitieron al Laboratorio Andaluz de Referencia de la Calidad del Aire, donde  fueron analizados para cuantificar dichos niveles de contaminación.

De forma simultánea, se utilizaron los resultados de un modelo de dispersión, que determina los niveles de contaminación que cabría esperar con las condiciones meteorológicas existentes en la zona y los niveles de emisión de las industrias cercanas. Los resultados obtenidos con el empleo de ambas técnicas de medición fueron analizados en el Centro de Datos de Calidad Ambiental, lo cual ha permitido determinar de qué manera contribuyen las emisiones industriales en su entorno.

Con objetivos similares, la Consejería de Medio Ambiente ha realizado este tipo de actuaciones para evaluar la influencia de una determinada área industrial en sus zonas cercanas más sensibles. Así en el año 2003 desarrolló una campaña en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar para determinar la influencia de las emisiones de la zona industrial de Carboneras; y durante el año 2004 se llevó a cabo otra en el Parque Natural Los Alcornocales, próximo a la zona industrial de Bahía de Algeciras.