Hasta el momento, solo dos de los 588 enclaves andaluces considerados de interés geológico han sido catalogados de interés cultural. Para revertir esta situación, la Consejería de Medio Ambiente está diseñando un programa que contará con los instrumentos financieros incluidos en el Programa Operativo 2007-2013 y que tendrá como objetivos primordiales la protección y conservación de la geodiversidad andaluza; el geoturismo y la gestión sostenible de estos recursos; la educación para la conservación del patrimonio geológico; y la consolidación de Andalucía en los programas internacionales relacionados con esta materia.
La Consejería de Medio Ambiente reforzará la importancia de coordinar el uso y la gestión sostenible de estos recursos, así como de lograr sinergias positivas entre los proyectos promovidos en esta materia desde las distintas administraciones, asociaciones e iniciativas privadas. La Estrategia se unirá a la reciente Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad en la definición de un nuevo marco normativo de referencia en el tratamiento de la geodiversidad.
Geoturismo
El geoturismo se convertirá en un importante dinamizador económico y social para las zonas rurales, según la estrategia de Medio Ambiente. Para ello, se dotarán enclaves geológicos concretos, como la Cueva de Nerja o la Gruta de las Maravillas, para potenciar su interés turístico.
Hasta ahora se han invertido 400.000 euros en Granada para la adecuación del manantial del río Castril, las cárcavas de Marchal, la falla de Nigüelas, los arenales de Trevenque, el karst de Sierra Gorda, el polje de Zafarraya, el cañón del río Guadiaro y los acantilados de Maro-Cerro Gordo, en lo que supone el primer itinerario geológico oficial creado en Andalucía. Se trata de extender esta fórmula al resto de provincias para que a partir de 2009 Cádiz, Córdoba, Jaén y Málaga cuenten con rutas similares.
Paralelamente, se ha establecido una estrategia para la valorización turística del patrimonio geominero, cuyo objetivo es llevar a cabo un aprovechamiento lúdico y recreativo de las numerosas infraestructuras mineras ahora en desuso. Para hacer posible que esta estrategia adquiera un valor global de aprovechamiento sostenible, desde la administración se está potenciando la creación de figuras de protección relacionadas con los valores geológicos.
Esta política ha seguido una trayectoria iniciada en la década de los noventa con el Inventario de Espacios Protegidos de Andalucía (en el que se consideraron valores geológicos junto con otros de tipo biológico, paisajístico y cultural), continuada con la creación de los primeros monumentos naturales andaluces específicamente geológicos, y consolidada con la posterior declaración, bajo la figura de geoparques, del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar y del Parque Natural Sierras Subbéticas.
La creación de estas dos últimas figuras es fruto de la participación de Andalucía en los foros y programas internacionales sobre esta materia. Presencia que se quiere reforzar ahora en el marco de la nueva Estrategia Andaluza de Conservación de la Geodiversidad. En este sentido se prevé, entre otras actuaciones, el fortalecimiento de los mecanismos de coordinación con el Grupo de Trabajo Geosites español.
Todos estos objetivos pasan necesariamente por lograr un mayor conocimiento de este valioso patrimonio andaluz hasta colocarlo al mismo nivel atribuido a otras expresiones de la biodiversidad como la flora y la fauna. Para ello, la Junta de Andalucía dará continuidad al proceso de evaluación y control de las necesidades y amenazas, a la potenciación de la educación y la sensibilización social, al favorecimiento de la investigación aplicada, al impulso de la prevención ambiental y a la apuesta por la difusión y divulgación en esta materia emprendida en los últimos años.