En las sesiones científicas se abordaron, entre otros asuntos, los efectos del cambio climático sobre la biodiversidad y hábitats de alta montaña, seguimiento del cambio global en la Red de Parques Nacionales, así como las distintas experiencias y modelos de gestión vinculados al seguimiento del cambio global y a la adaptación de los sistemas naturales.
En el congreso se informó también de la puesta en marcha en el Espacio Natural de Sierra Nevada de un Observatorio de Cambio Global, que servirá de ensayo para la aplicación de medidas de gestión dirigidas a la adaptación de la biodiversidad y hábitats a los impactos del cambio climático, así como para minimizar el perjuicio que este puede tener sobre el aprovechamiento de los recursos naturales.
Para estudiar el cambio global en Sierra Nevada, la Consejería de Medio Ambiente lleva a cabo un Programa de Seguimiento de Procesos y Recursos Naturales, que incluye el diseño de un sistema de 116 indicadores ambientales para la detección, observación y evaluación de los efectos del cambio global en los diferentes elementos naturales y socioeconómicos
Esta iniciativa se desarrolla dentro del proyecto denominado Glochamore (Global Change in Mountain Regions) de la UNESCO, en el que participa un total de 28 reservas de biosfera ubicadas en diferentes zonas montañosas de todos los continentes, siendo Sierra Nevada la única reserva española que participa en este programa internacional. En este proyecto, que se enmarca en el Plan Andaluz de Acción por el Clima, participa el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, a través del Organismo Autónomo Parques Nacionales, y la comunidad científica.
Sierra Nevada, por su latitud, altitud y características ecológicas y culturales constituye un enclave de gran valor para el estudio del cambio global. En ello incide además el efecto que manifiesta de isla climática húmeda en un entorno seco.