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BARRANQUISMO EN EL PARQUE NATURAL SIERRA DE CASTRIL

 
DESCRIPCIÓN

El barranquismo es un deporte de aventura que se practica en los cañones o barrancos de un río, pudiendo presentar un recorrido muy variado, con vegetación y con un caudal variable e incluso secos. El barranquismo consiste en ir superando estos cambios de recorrido: caminando, nadando, destrepando y en muchos casos rapelando. Así mismo en muchas ocasiones es necesario, conveniente y quizás lo más oportuno saltar a pozas de agua o saltar entre los diversos obstáculos naturales que podemos encontrarnos. En el equipo que realiza la actividad, las personas debe tener como mínimo, un casco, un traje de neopreno, escarpines de neopreno, calzado adecuado, un arnés, bloqueadores mecánico, cuerda especialmente diseñada para hacer la actividad, una navaja, un silbato y una mochila, la cual deberá ser adecuada con capacidad para retirar el agua que queda dentro teniendo en la propia mochila alguna abertura indicada para la evacuación de la misma.

 

La singular orografía del Parque Natural Sierra de Castril, que cuenta con macizos montañosos de abruptas y empinadas laderas y farallones verticales, superando en varios puntos los 2.000 metros de altitud, resulta un escenario especialmente propicio para la realización de este tipo de actividad, bien con empresas de turismo activo o bien por grupos que realizan la actividad por libre. Dentro del Parque Natural Sierra de Castril se realizan actividades de barranquismo en 4 zonas: Barranco del Buitre o de Lézar, Cerrada de la Magdalena o Malena, Cerrada de Túnez y Barranco Seco.  

 

En el menú principal de este mismo portal web, dentro de la sección MULTIMEDIA/VIDEOS, está disponible un video sobre el barranquismo en la Sierra de Castril.

 

1) Barranco del Buitre o de Lézar

Presidiendo la cabecera del Barranco del Buitre se sitúa el pico del cual recibe el nombre. El Pico del Buitre es, con 2.021 metros de altitud, uno de los más emblemáticos del Parque Natural de la Sierra de Castril, debido a su prominencia e identificable silueta.

 

El descenso aquí propuesto comprende únicamente el tramo inferior del Barranco del Buitre o de Lézar, el tramo equipado de acceso más inmediato de entre los tres con que cuenta este barranco. La aproximación a pie hasta el inicio del descenso se realiza desde el Cortijo Majada de Lézar, el más bajo de los dos cortijos existentes en esta zona. Una vez introducidos en el cauce del barranco, se sucederán hasta 10 rápeles, de los cuales, 8 son de realización obligada. Los 2 últimos rápeles del barranco son los más impresionantes, salvando 23 y 25 metros de altura respectivamente. El descenso finaliza en el Manantial de Lézar, fuente permanente de este barranco. La vuelta al punto de inicio se realiza a través de una senda que, remontando la vertiente izquierda del barranco, enlaza con el camino que llega hasta el Cortijo Majada de Lézar. Presidiendo la cabecera del Barranco del Buitre se sitúa el pico del cual recibe el nombre. El Pico del Buitre es, con 2021 metros de altitud, uno de los más emblemáticos del Parque Natural de la Sierra de Castril, debido a su prominencia e identificable silueta.

 

El tramo inferior de este barranco tiene una distancia 170 metros, un desnivel de 77 metros y su duración es de 2 horas.

 

2) Cerrada de la Magdalena o Malena

Como cerradas se conoce por estas sierras a las profundas gargantas o desfiladeros originados como consecuencia de la erosión fluvial sufrida por el terreno calizo. De tal modo, el Barranco de la Magdalena se ha abierto camino en su parte inferior atravesando los estratos verticales que conforman uno de los flancos del pliegue sinclinal sobre cuyo eje discurre el Río Castril. La erosión diferencial sufrida por estos estratos ha dado lugar a un paisaje de una extraordinaria y singular belleza.

 

El descenso que se propone comprende únicamente el tramo equipado que discurre a través de la Cerrada de la Malena, última de las brechas que atraviesa el barranco homónimo antes de unirse al Río Castril. Para llegar al punto en el que comienza el descenso partiremos desde el Puente de Pino Hermoso siguiendo el sendero señalizado “Cerrada de la Magdalena”. El carril que comenzaremos a seguir discurre a través de la margen derecha del Río Castril. Tras transitar por carril y, a continuación, por sendero, llegaremos a los pies de la Cerrada de la Malena. Finalizado el sendero señalizado en dicho punto, comenzaremos a remontar la ladera situada a nuestra izquierda. Al alcanzar el límite inferior de un gran peñasco, recorreremos ésta en diagonal para terminar introduciéndonos en el interior de la cerrada, justo por encima del punto en el que se encuentra la cabecera del primer rápel. El descenso propuesto se compone únicamente de 2 rápeles que salvan 25 y 28 metros de altura de forma sucesiva. De encontrarse seco el barranco, el agua corriente solo la encontraremos en la poza sobre la que vierte sus aguas el Manantial de la Malena, poza que constituye la recepción del segundo rápel y que se sitúa justo a los pies de la cerrada. Completado el descenso, solo nos quedará regresar al Puente de Pino Hermoso deshaciendo el camino recorrido desde el mismo.

 

Este barranco tiene una longitud de 32 metros y un desnivel 53 m, realizándose aproximadamente en 30 minutos.

 

3) Cerrada de Túnez

La Cerrada de Túnez se ha abierto camino atravesando los estratos verticales que conforman uno de los flancos del pliegue sinclinal sobre cuyo eje discurre el Río Castril. La erosión diferencial sufrida por dichos estratos ha provocado que estos se muestren a modo de impresionantes farallones de roca caliza dispuestos en paralelo y distantes entre sí, dando lugar a un paisaje de una extraordinaria y singular belleza.

 

La actividad que aquí se propone es el descenso de la Cerrada de Túnez. Para llegar al punto en el que comienza este descenso de barrancos partiremos desde el Cortijo del Nacimiento, siguiendo el sendero señalizado que conduce hasta la cima de Las Empanadas. Tras superar unos 300 metros de desnivel siguiendo dicho sendero, sobrepasaremos un collado a partir del cual comenzaremos a ganar vistas sobre la parte superior del Barranco de Túnez. Justo abajo, en el cauce, divisaremos la “brecha” o “puerta de atrás” de la cerrada, debiendo dirigirnos hacia ella descendiendo a través de una pedregosa pendiente. Una vez alcanzada la brecha, nos equiparemos y comenzaremos el descenso. A través de la Cerrada de Túnez no suele discurrir el agua habitualmente, salvo después de llover o con el deshielo que sucede a las nevadas. El descenso conlleva la realización de hasta 11 rápeles y de varios destrepes, sin posibilidad de salto. De la mitad del descenso en adelante la cerrada se hace profunda y estrecha, volviéndose muy vertical al final. El último rápel, el más espectacular de todos, cuenta con 27 metros de altura y nos deposita al pie de un impresionante farallón rocoso, junto al Manantial de Huerta Morcillo. Finalizado el descenso, regresaremos al Cortijo del Nacimiento, cruzando el Río Castril y subiendo por el camino de la Central Hidroeléctrica.

 

El barranco tiene una longitud de 322 metros con un desnivel 155 m y una duración de 3 horas.

 

4) Barranco Seco

La cabecera de Barranco Seco se sitúa sobre la vertiente sureste del Pico del Buitre, cima que, con sus 2.021 metros de altitud, y su prominente silueta, es una de las más destacadas de la Sierra de Castril. El Barranco Seco se sitúa muy próximo al Barranco del Buitre, pudiéndose realizar el descenso de ambos en el mismo día.

 

Para realizar este descenso de barrancos optaremos por llevar a cabo una combinación de vehículos. De tal modo, seguiremos con nuestros vehículos desde el inicio del camino de los Madroñales, en el km 4 de la carretera A-326 (Pozo Alcón-Castril), que discurre a través de la vertiente derecha del valle del Río Castril. Al pasar por el lugar en el que el carril que seguimos atraviesa el cauce de Barranco Seco, dejaremos allí estacionado el primer vehículo y continuaremos con el segundo vehículo 1,7 kilómetros más, hasta llegar a un cruce que se sitúa poco después de que el carril comience a bajar. Dejaremos estacionado el segundo vehículo junto al cruce (en una zona explanada, junto a un solitario chaparro), y comenzaremos a caminar siguiendo el carril secundario que sale a nuestra derecha, remontando la ladera. Seguiremos el carril hasta llegar al Cortijo de los Peñoncillos, y, pasado este, siguiendo un sendero algo perdido, remontaremos una vaguada hasta llegar a las ruinas del Cortijo de Poyo Ramos. Por encima del cortijo encontraremos su era, junto a la cual pasaremos para comenzar a descender en dirección nordeste. Pronto giraremos levemente a la izquierda, sobrepasaremos una loma, y, a continuación, giraremos a la derecha para descender hasta alcanzar el cauce del Barranco Seco. Una vez situados en el cauce, lo seguiremos brevemente en sentido descendente hasta toparnos con el primer rápel. El Barranco Seco no suele llevar agua, salvo después de abundantes lluvias o con el deshielo que sucede a las nevadas, como el resto de los barrancos de esta zona. El descenso del barranco conlleva la realización de hasta 13 rápeles y de varios destrepes, sin posibilidad de salto, y discurre alternando tramos abiertos con otros más estrechos. Una vez superado el caos de bloques que constituye la última dificultad del descenso, caminaremos por el cauce unos 250 metros hasta llegar a nuestro primer vehículo.

 

El barranco presenta una distancia de 515 metros, a través de 222 m. de desnivel y se realiza aproximadamente en 3 hora y 20 minutos.

 

 

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