La desembocadura del rio Piedras constituye uno de los enclaves naturales más llamativos de todo el litoral de la provincia de Huelva albergando en sus inmediaciones una singular variedad de ecosistemas y paisajes. La rica diversidad de estos enclaves ha servido de atractivo para el desarrollo de una oferta turística de calidad en el entorno de la localidad costera de El Rompido, punto de partida desde donde pueden practicarse numerosas actividades vinculadas al disfrute del medio natural y a los deportes de naturaleza. Entre éstas destaca la interpretación de los ecosistemas de la zona a través de una amplia red de senderos. En concreto, en el entorno de la desembocadura del río Piedras, la Consejería de Medio Ambiente ofrece la posibilidad de recorrer varios senderos señalizados de los que el del río Piedras permite la posibilidad de recorrer un paisaje de excepcional belleza y singularidad.

El sendero parte de la localidad de El Rompido recorriendo un itinerario a lo largo de una pasarela de madera situada junto a la marisma que se extiende hacia la desembocadura del río Piedras y colindante con las instalaciones deportivas asociadas a los complejos hoteleros de la referida localidad turística. La pasarela salva mediante un tramo elevado el Caño del Tendal, uno den los brazos tributarios de la marisma del Piedras a partir de donde el sendero se bifurca en dos direcciones dando inicio al tramo circular. A la izquierda continua bordeando la marisma, en dirección al río Piedras. Durante este tramo el usuario podrá detenerse en los miradores situados en el margen del sendero y contemplar amplias panorámicas de la Flecha y de la desembocadura del río Piedras así como de la Isla del Vinagres y de los restos de las antiguas salinas tradicionales algunas de cuyas balsas están destinados actualmente a cultivos marinos.

Por su parte el tramo de sale a la derecha se introduce en una zona de pinar litoral donde destaca la presencia bajo su cubierta de una potente y diversa flora arbustiva: lentiscos, retamas y algunos ejemplares dispersos de sabina marítima. Este tramo se eleva ligeramente sobre el nivel general del entorno hasta alcanzar un pequeño mirador desde el que puede tenerse una buena panorámica de la población del Rompido, de su puerto deportivo y de las marismas del Tendal.