La consejera de Conocimiento, Lina Gálvez, en el Parlamento.
La consejera de Conocimiento, Investigación y Universidad, Lina Gálvez, ha anunciado en comisión parlamentaria que su departamento impulsará un nuevo mapa de titulaciones de las universidades públicas andaluzas, así como la puesta en marcha de un plan estratégico para mejorar la presencia de las mujeres en la ciencia.
Gálvez, que ha informado en Comisión parlamentaria las líneas de actuación estratégicas de su departamento hasta final de la legislatura, ha explicado que una de las apuestas estratégicas de su departamento será “trabajar en la mejora de esa sinergia entre formación, innovación y las distintas etapas del emprendimiento, de manera que la economía andaluza no solo crezca más en función de los indicadores convencionales, sino que lo haga garantizando una mayor igualdad y justicia social, incluyendo la igualdad de género, y una generación de riqueza que esté más fijada al territorio”.
La titular de Conocimiento ha señalado que la nueva organización de la Consejería de Conocimiento pretende facilitar “que Andalucía se prepare para los cambios globales que traerá la cuarta revolución industrial, a través de las sinergias entre la formación y la investigación y todo el ciclo de acompañamiento empresarial, desde el emprendimiento a la consolidación de las empresas, del trabajo autónomo y economía social, así como la internacionalización”.
En relación a la política de Universidad, Gálvez ha resaltado que la Junta realizará un nuevo mapa de titulaciones “que permita a las universidades adaptar su oferta presente y futura a las necesidades y retos de Andalucía, además de dar respuesta al impacto que tendrá la 4ª revolución industrial con la formación adecuada y de calidad”.
Entre las medidas más relevantes relacionadas con la educación superior, la consejera ha hecho hincapié en la consolidación y extensión de las bonificaciones de matrícula, que el Gobierno andaluz puso en marcha este curso.
Asimismo, como una de las novedades, la Consejería de Conocimiento diseñará un plan estratégico para la incorporación de las mujeres a la ciencia, “un instrumento que nos permita despertar desde la infancia vocaciones y aumentar la presencia femenina en ramas como tecnología, ingeniería y matemáticas”.
Como primer paso, se desarrollarán mecanismos que incrementen la representación de las mujeres en el ámbito científico y académico, con un programa específico de mujeres científicas y tecnólogas, “de modo que refleje una situación real de equilibrio social, algo que no ocurre actualmente, en especial en las etapas más altas de la carrera académica”.
También en el ámbito académico, la Consejería contempla un nuevo decreto de distinción de excelencia del doctorado, “que fortalezca las buenas prácticas y los resultados en estos programas”, y trabaja en el diseño de una carrera académica dentro de las universidades, “con reglas de juego claras y que perduren en el tiempo, para que las y los jóvenes puedan diseñar sus carreras con certezas y medir sus apuestas profesionales”.
Junto a ello, ha anunciado el lanzamiento de un nuevo contrato denominado ‘María Castellano’, en honor de la primera mujer catedrática de una facultad de medicina española, jiennense y formada en Granada, que ayudará a formar a personas que hayan terminado su especialidad para que se acrediten antes de los 35 años bajo la figura de contratado doctor vinculado.
En investigación y transferencia, Gálvez ha indicado que el Gobierno andaluz seguirá desplegando el Plan Andaluz de Investigación (PAIDI 2020), que en dos años ha desplegado más de 320 actividades y ha movilizado más de 2.500 millones de euros, con la apertura de nuevas convocatorias para infraestructuras de investigación y proyectos de I+D, por valor de 23 millones de euros; para proyectos de investigación e innovación en centros públicos, con 35 millones, y para I+D en las pymes, con 5 millones.
Emprendimiento y Economía Social
Como parte de las medidas específicas para economía social, la consejera ha señalado la importancia del Programa de Relanzamiento de la Economía Social PROGRESA, en el que la Consejería ha empezado a trabajar, “dirigido a fortalecer el crecimiento y competitividad del tejido de empresas, entidades, fundaciones y asociaciones de este sector, contribuyendo así al incremento del empleo sostenible, y lograr una Andalucía más igualitaria y cohesionada”.
Tras la creación en enero del Consejo Andaluz de Entidades de Economía Social, CAEES, como máximo órgano de coordinación y participación en esta materia entre la Junta, entidades más representativas de las empresas de dicho sector y organizaciones sindicales, en las próximas semanas se producirá la constitución del mismo. A través de este organismo, ha destacado la consejera, “se dará cabida a otra economía y otra forma de generar riqueza, a través del impulso a monedas sociales y bancos de tiempo”.
En materia de emprendimiento, ha recordado que la nueva Ley Andaluza de Fomento del Emprendimiento (LAFE), aprobada recientemente por el Parlamento, hará que Andalucía sea la primera comunidad autónoma en España que cuente con un Sistema Andaluz de Emprendimiento.
Entre las medidas que se desarrollarán en el marco de esta Ley ha destacado la Estrategia de Impulso Emprendedor en el Medio Rural, con la implantación de microprogramas rurales para emprender; continuar con la implantación de la Red de CADEs universitarios, “de manera que haya uno en todas las universidades andaluzas para facilitar la transferencia de conocimiento a la sociedad”; el Programa de Formación Para Emprender, consensuado con los agentes sociales y las Universidades andaluzas; y seguir avanzando en las Cátedras de Emprendimiento Universitario, para facilitar la cultura emprendedora y la transferencia de resultados de investigación redunden en bienestar ciudadano.
En este mismo contexto, ha señalado que la Junta apoyará “de manera firme y decidida” al emprendimiento femenino, con servicios específicos de asesoramiento a emprendedoras, especialmente en aquellos espacios donde las mujeres encuentran más dificultades para emprender.
Ha recordado que “mujeres y hombres nos insertamos de manera distinta en el tejido productivo, debido al mandato social de los cuidados, que siguen soportando las mujeres, por tanto, se requieren apoyos y servicios específicos para el emprendimiento femenino”.
Del mismo modo, se incorporará al Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) a los servicios de apoyo al emprendimiento, “para asegurar la implementación transversal de los objetivos de igualdad de género” y abrir la puerta a colaborar con entidades privadas para el fomento de la igualdad y el empoderamiento de las mujeres.
Internacionalización y trabajo autónomo
También con ese propósito, se ha solicitado la inclusión del Instituto Andaluz de la Mujer en Extenda, para reforzar la idea de la transversalidad de género en la internacionalización, además de llevar al Consejo de Administración de la Agencia Andaluza de Promoción Exterior que la consejera presida este organismo.
Gálvez ha explicado que esto servirá para impulsar la coordinación de la política de internacionalización en la Junta y abrir nuevos cauces para el desarrollo de medidas específicas para la economía social, emprendimiento y trabajo autónomo.
De este modo, ha apuntado que, para incrementar el peso del sector exportador en el PIB, uno de los objetivos fundamentales del Plan de Internacionalización Horizonte (PIH) 2020, se impulsará el emprendimiento internacional con la puesta en marcha de un Programa de internacionalización para emprendedores, que atenderá principalmente a mujeres emprendedoras y jóvenes y pondrá el foco en startups andaluzas; y un programa de apoyo a la internacionalización de empresas de economía social y trabajo autónomo.
Respecto al trabajo autónomo, ha anunciado que, como parte del desarrollo del Plan de Actuación para el Trabajo Autónomo de Andalucía (Horizonte 2020), se encuentra ya en tramitación el Programa de emprendimiento, segunda oportunidad y estabilización económica de las empresas de trabajo autónomo, con nuevas ayudas para grupos como mujeres trabajadoras autónomas de hasta 35 años y hombres trabajadores autónomos de hasta 30 años; mujeres mayores de 35 años y hombres mayores de 30; personas con discapacidad reconocida en un grado igual o superior al 33%, víctimas de violencia de género y víctimas de terrorismo.
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