La Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, a través de la Agencia Andaluza de la Energía, pone a disposición de ciudadanos, empresas y ayuntamientos más de 149 millones de euros para proyectos de usos de energías renovables, ahorro y eficiencia energética, instalaciones de generación eléctrica para autoconsumo y para la adquisición de vehículos eléctricos y sus infraestructuras de recarga.

El titular de este departamento, Antonio Ávila, ha inaugurado en Sevilla unas jornadas sobre oportunidades de mejora en materia energética, foro en el que ha dado a conocer los dos instrumentos de fomento de la sostenibilidad energética (programa de subvenciones, 59 millones, y fondo reembolsable, 90 millones) del Gobierno andaluz.

Respecto al programa de subvenciones, son ayudas a fondo perdido y contempla la subvención de mejoras como la instalación de energía solar para agua caliente en viviendas particulares, la renovación de ascensores más eficientes en comunidades de vecinos, las instalaciones fotovoltaicas para generación eléctrica de autoconsumo en instalaciones productivas y comerciales, la sustitución de lámparas más eficientes en el alumbrado público o la adquisición de vehículos eléctricos para el parque móvil municipal o para flotas de transporte de empresas.

Desde su activación en 2009, se han aprobado subvenciones en toda Andalucía por más de 143 millones con las que se han apoyado más de 61.000 actuaciones, que han movilizado una inversión superior a los 555 millones. En la provincia de Sevilla, se han concedido subvenciones por valor de 28 millones que han posibilitado más de 14.600 actuaciones de mejora energética.

El segundo instrumento, el Fondo Reembolsable para el impulso de las energías renovables y la eficiencia energética, permite financiar proyectos mediante préstamos ordinarios, préstamos participativos y otorgamiento de garantías, en condiciones de mercado. Hasta la fecha se han aprobado 5,8 millones en subvenciones dirigidas a apoyar 14 proyectos en toda Andalucía. Estos proyectos energéticos han movilizado 11,6 millones y han favorecido la creación de más de 170 puestos de trabajo.

En este sentido, el consejero ha apostado por estas dos herramientas que pretenden "paliar las dificultades" que se están encontrando los ciudadanos, empresas e instituciones a la hora de abordar mejoras energéticas debido a la coyuntura política y económica actual. Así, se ha referido a los problemas de financiación y de liquidez y a la paralización, por parte del Gobierno estatal, de las políticas dirigidas a la sostenibilidad energética que se venían desarrollando en los últimos años.

Marcha atrás del sector por las políticas estatales

Una marcha atrás, ha subrayado Ávila, que la Junta de Andalucía ha constatado con la decisión de eliminar en los Presupuestos Generales del Estado las partidas y programas de impulso de políticas de ahorro, eficiencia energética y energías renovables y con las reformas energéticas aprobadas por el Gobierno de España, que no han sido dialogadas ni con las comunidades autónomas, ni con el sector empresarial, ni con los consumidores. Estas últimas reformas han paralizado los incentivos a las energías renovables y ha puesto en riesgo en Andalucía inversiones comprometidas por valor de 12.000 millones y que iban a crear más de 38.000 empleos.

Además, a ello se une la última reforma, aprobada el viernes pasado por el Consejo de Ministros, que supondrá una subida inmediata de la factura de la luz del 3,2% y que gravará aun más la economía de familias y de empresas.

Por todo esto, Ávila ha asegurado que desde Andalucía "nos esforzamos en dar continuidad al desarrollo del modelo energéticamente sostenible en el que llevamos años trabajando" y con "razones de peso", pues la sostenibilidad energética plantea numerosos beneficios desde el punto de vista ambiental, económico, tecnológico y social.

Entre ellos destacan la reducción de la factura eléctrica en hogares y en empresas (se ha reducido nuestra intensidad energética en más de un 4% en los últimos 5 años), la autosuficiencia, la dependencia energética exterior, con el coste que esto supone para nuestra economía (las renovables cubren hoy el 15,8% del consumo de la energía primaria de Andalucía) o la reducción de la contaminación ambiental derivada del uso fuentes energéticas convencionales (en la última década se ha disminuido un 42% las emisiones de Dióxido de Carbono por cada unidad de generación eléctrica producida.

Además, el consejero ha defendido este modelo porque favorece el crecimiento de un tejido productivo innovador y competitivo. El sector relacionado con esta actividad cuenta con más de 1.400 empresas, que emplean a más de 44.000 personas. "Hoy Andalucía es el centro de operaciones obligado para las principales multinacionales del sector y es región referente en I+D+i en este campo".

Por último, ha recalcado que el Gobierno andaluz está decidido "a no desperdiciar los logros alcanzados" durante años de fomento de este modelo de sostenibilidad energética, por lo que entiende que su responsabilidad "es facilitar la implicación de todos los actores para conseguirlo".