Forenses informáticos y analistas en seguridad que protejan a los usuarios en un entorno cada vez más cibernético, especialistas en construcción de tejidos y terapias celulares, panaderos con formación concreta en masa madre y cereales tradicionales, especialistas en audiodescripción y subtitulación que hagan más accesibles las producciones multimedia... Andalucía cuenta desde el pasado mes de noviembre con un programa de Cursos de Especialización de FP en áreas profesionales muy demandadas y con un alto índice de empleabilidad.

Todas las provincias andaluz imparten alguno de estos programas, un total de 32, de los que se benefician 640 alumnos. La oferta formativa, correspondiente a seis familias distintas, incluye los cursos de Cultivos Celulares, de la familia profesional de Química; Audiodescripción y Subtitulación, de la familia de Imagen y Sonido; Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de la Información, de la familia de Informática y Comunicaciones; Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de Operación, de la familia de Electricidad y Electrónica; Digitalización del Mantenimiento Industrial y Fabricación Inteligente, de la familia de Instalación y Mantenimiento, y Panadería y Bollería Artesanales, de la familia de Hostelería y Turismo.

Esta especie de 'másteres de FP', puestos en marcha por la Consejería de Educación y Deporte, están destinados a titulados en Ciclos Formativos de Grado Medio y Grado Superior, con el objetivo de que profundicen en áreas de conocimiento específicas y puedan adaptarse al máximo a las necesidades del mercado laboral.

Fue precisamente el interés por continuar desarrollándose en su ámbito de trabajo el que motivó a Álvaro Checa a inscribirse en uno de estos cursos. Director del Área de Administración Técnica en la empresa Softcom Informática, en Mairena del Aljarafe (Sevilla), es actualmente alumno de Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de la Información en el IES Punta del Verde, de Sevilla.

"Estudié Administración de Sistemas Informáticos (hoy Grado Superior de Administración de Sistemas Informáticos en Red) y no he dejado de trabajar desde que accedí al mercado laboral hace ya 12 años", explica. Las actuaciones en materia de seguridad y ciberseguridad de su empresa, que se suman también a la actividad de soporte al usuario, lo han conducido a ampliar sus conocimientos mediante este programa formativo.

"Ya he realizado varios proyectos de ciberseguridad. Es un trabajo que tiene una importancia vital; un tema que está tan al día que hay que esforzarse y seguir mejorando. Tenemos que estar en la cresta de la ola", opina. De hecho, entre sus proyectos de futuro cuenta con profundizar en la vertiente de análisis forense informático y alcanzar una mayor especialización en el ámbito de la ciberseguridad: "Sería un añadido a mis atribuciones actuales".

Los Cursos de Especialización de FP implantados en Andalucía tienen una duración de 500 a 700 horas -aproximadamente dos trimestres- y podrán incluir una parte de prácticas en centros de trabajo. Además, se establece una equivalencia de cada módulo profesional con créditos europeos ECTS, con el fin de facilitar el reconocimiento de créditos entre el Curso de Especialización y las enseñanzas conducentes a títulos universitarios, y viceversa.

El carácter práctico del programa formativo es uno de los principales aspectos que subrayan tanto los alumnos como los docentes que participan en estos cursos. "Destacaría el carácter práctico y de inmediata aplicación de todo lo que nos están enseñando", apunta Álvaro Checa, que añade que, "aunque existe obviamente teoría, todo el contenido es inmediato, está disponible en la red y lo demandan actualmente". "Sientes que lo que estás aprendiendo no es una entelequia, sino que es algo que vas a aplicar y que estás aprovechando el tiempo", asegura el estudiante.

En ese enfoque práctico incide también Rosario Alcázar, profesora del Departamento de Informática y Comunicaciones del IES Punta del Verde y una de las docentes del curso de Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de la Información en el centro. En este sentido, asegura que "las clases se organizan como cualquier módulo de otro ciclo formativo, solo que se intenta que sean mucho más prácticas, ya que la formación previa del alumnado es de nivel académico".

Certificación académica

Hasta ahora, los titulados de FP que querían actualizar sus conocimientos podían optar por realizar otro ciclo formativo, matricularse en cursos de formación para el empleo u optar por formación no reglada mediante costosos cursos y certificaciones privadas. Con los nuevos cursos, el estudiante obtendrá una certificación académica que complementa el título oficial y que tendrá validez en todo el territorio nacional.

Aunque la mayoría de los alumnos que han optado por esta formación ya está trabajando, en algunos casos se habían desvinculado hace años del mundo laboral y este programa puede servirles para reincorporarse. De hecho, aunque algunos rondan la veintena, la edad media de los participantes se sitúa entre los 37-38 años.

"Siempre intentamos tener en cuenta el nivel de partida del alumnado. Los conocimientos previos no son los mismos, pero intentamos que todo vaya fluyendo, adecuarnos a las necesidades de cada uno de ellos", indica la profesora Rosario Alcázar.

Esta adaptación de los docentes a las necesidades formativas y laborales del alumnado y, en paralelo, la actitud activa de estos últimos contribuye al dinamismo y flexibilidad de las clases. "Nuestros alumnos vienen con las ideas muy claras de lo que quieren -declara Alcázar-, se interesan por hacer proyectos concretos, plantean muchas de las prácticas para que tú se las prepares, investigan y contribuyen a su propia formación".

La pandemia por coronavirus ha conducido, asimismo, a potenciar la teleformación y el uso de herramientas TIC, algo que también será de gran utilidad para todos los alumnos de estos cursos de especialización.

Los estudiantes coinciden en su elevada satisfacción con la formación que están recibiendo. A ello contribuye, en gran parte, el esfuerzo del profesorado, que refuerza su preparación para impartir los cursos. "Para los profesores es una labor extra de estudio, pero ver que todo está saliendo adelante gratifica muchísimo", resalta Rosario Alcázar, para quien "la FP y, en concreto estos cursos de especialización, han sido un acierto muy grande".