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La Junta y la Plataforma de Voluntariado se alían para unir aprendizaje y solidaridad en escolares

Tanto el aprendizaje-servicio como el impulso del voluntariado desde edades tempranas forman parte del Plan Estratégico de Voluntariado

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento del convenio de colaboración firmado entre las consejerías de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad con la Plataforma Andaluza de Voluntariado para el desarrollo de actuaciones conjuntas en materia de aprendizaje-servicio (ApS), metodología pedagógica que combina procesos académicos con servicios a la comunidad y acciones solidarias.

El aprendizaje-servicio se incluye dentro de las 60 medidas recogidas en el primer 'Plan Estratégico Integral de Voluntariado y Participación Ciudadana en Andalucía, Horizonte 2026', que se aprobó el pasado mes de enero en Consejo de Gobierno y que busca la promoción de la participación ciudadana en programas de voluntariado y, entre otras medidas, el fomento de la acción solidaria desde edades tempranas. De ahí, la importancia de este convenio, el cual tiene una vigencia de cuatro años prorrogables a otros cuatro más y que busca el desarrollo de proyectos de esta metodología en todos los centros educativos públicos. Además, se constituirá una comisión de seguimiento para velar por su cumplimiento.

En Andalucía se desarrollan durante los últimos años experiencias fundamentadas en la metodología del Aprendizaje-Servicio que logran, de forma paulatina, transformar la realidad socioeducativa de la escuela y su entorno, movilizando la aportación cultural y educativa de muchas personas implicadas en la mejora de la educación. Así, el aprendizaje-servicio es una propuesta educativa que combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en un solo proyecto, bien articulado, en el que los participantes se forman al trabajar sobre necesidades reales del entorno con el objetivo de mejorarlo. Esta metodología educativa innovadora promueve la transferencia de aprendizajes curriculares a situaciones de la vida real, donde el alumnado es el protagonista, tanto dentro como fuera del entorno educativo, facilitando el autoconocimiento, el pensamiento reflexivo y crítico, la empatía y la inclusión ciudadana.

Así, ante los nuevos escenarios, el movimiento asociativo en general y el voluntariado en particular hacen necesaria la realización, de forma coordinada, de proyectos de este tipo. Además, en la planificación del proceso de enseñanza-aprendizaje no sólo interviene el profesorado y el alumnado, sino también otros agentes educativos implicados como familias, entidades de voluntariado e instituciones públicas. El aprendizaje-servicio contribuye a que el alumnado se desarrolle globalmente y a que sea partícipe en los logros de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, convirtiéndose así en ciudadanos del presente con una conciencia global responsable y que son capaces de mejorar su entorno más próximo.

Bases del convenio

De este modo, el convenio recoge el compromiso de las dos consejerías y la Plataforma Andaluza de Voluntariado para impulsar esta metodología, la cual está cargada de compromiso con la comunidad. En concreto, la Consejería de Inclusión Social, entre otras funciones, va a promover la formación sobre aprendizaje-servicio entre las entidades de voluntariado; impulsará el trabajo en red a través de encuentros entre los centros docentes y entidades de voluntariado y facilitará la realización de las actuaciones necesarias para la realización de estos proyectos.

Por su parte, la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional se compromete a garantizar el acceso a los centros docentes a las personas voluntarias implicadas en los proyectos de aprendizaje-servicio; difundir este convenio entre todos los centros públicos, así como a colaborar en todas las actuaciones para la puesta en marcha de estas iniciativas.

Finalmente, la Plataforma Andaluza del Voluntario, entidad sin ánimo de lucro integrada por casi 600 entidades de voluntariado de diversos campos de actuación, se encargará de desarrollar medidas para impulsar proyectos de aprendizaje-servicio en entidades de voluntariado; de formar sobre esta metodología, además de, entre otras funciones, generar espacios de encuentro entre el mundo educativo y social y realizar mapeos periódicos para actualizar los proyectos y su evolución.