Efectos
sobre la salud y posibles actuaciones de prevención, control
y reducción de la contaminación
Dióxido
de nitrógeno
El dióxido de nitrógeno
es un gas pardo-rojizo, no inflamable y tóxico que se forma, principalmente,
por la oxidación atmosférica del monóxido de nitrógeno producido
en los sistemas de combustión.
Origen y formación
del Dióxido de Nitrógeno
El origen del dióxido
de nitrógeno puede ser natural, y se da en procesos biológicos
de suelos, en las tormentas, y por la oxidación del monóxido de
nitrógeno natural. En cuanto a las fuentes antropogénicas, la
oxidación del nitrógeno presente en el aire y en el combustible
durante los procesos de combustión a alta temperatura, así como
la fabricación de ácido nítrico y diversos procesos de nitración
industrial son las más importantes. La fuente principal de NO
(óxido nítrico) antropogénico en zonas urbanas es la oxidación
incompleta del nitrógeno atmosférico en los motores de combustión
interna, y por ello, en dichas áreas los automóviles son los principales
culpables de las emisiones de este contaminante.
Dióxido de Nitrógeno
y Salud
El dióxido de nitrógeno,
puede presentar riesgos para la salud. La concentración de óxido
nítrico presente en la atmósfera no se considera peligroso para
la salud; sin embargo, si se oxida a dióxido de nitrógeno, sí
presenta características nocivas. Los problemas que ocasionan
están relacionados con el sistema respiratorio; pueden producir
irritación nasal, incomodidad respiratoria y dolores respiratorios
agudos, aunque éstos precisan concentraciones superiores a las
normalmente encontradas en la atmósfera.
Posibles actuaciones
de prevención, control y reducción de la contaminación
La estrategia para la
reducción de la contaminación pasa por la limitación del tráfico
en las concentraciones urbanas. En diversos procesos industriales
debe existir una adecuada regulación de las condiciones de funcionamiento
y cuando esto no es suficiente pueden utilizarse los sistemas
depuradores de gases.

 
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