El Consejo de Gobierno ha declarado Bien de Interés Cultural, con la categoría de Conjunto Histórico, la población onubense de Cortelazor. Esta localidad, situada en pleno Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, presenta como principal atractivo su bien conservada arquitectura tradicional serrana.
Las primeras noticias sobre la ocupación efectiva de Cortelazor datan de la conquista cristiana en el XIII, aunque en su territorio también se han documentado vestigios de épocas anteriores, como diversos enterramientos de la Edad del Bronce y una villa romana en las inmediaciones de la Ermita de Nuestra Señora de la Coronada.
La adaptación del núcleo urbano al accidentado medio físico en el que se ubica ha influido notablemente en su característico predominio de manzanas irregulares y calles estrechas y empinadas. Entre sus espacios públicos destaca la Plaza de Manuel Sánchez Bermúdez, sencillo ensanche de calles presidido por un viejo olmo que, según la tradición, fue testigo de las primeras reuniones del cabildo.
Como edificios singulares, sobresalen la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Remedios, construida en 1565 y ampliada en el XVIII, y el Ayuntamiento, edificado en 1933 sobre los restos de la antigua Casa Consistorial del siglo XVIII. A ellos se añaden elementos de interés etnológico como el lavadero situado en las afueras de la localidad y la fuente de las proximidades de la iglesia parroquial, que data del siglo XIX y cuyo surtidor tiene forma de cabeza de león.
De acuerdo con el decreto de Bien de Interés Cultural, el nuevo conjunto histórico queda delimitado con una superficie de 6,9 hectáreas. Con su aprobación, Cortelazor se une a los doce pueblos de la Sierra de Huelva que ya cuentan con una protección específica para sus conjuntos históricos: Alájar, Almonaster la Real, Aracena, Aroche, Castaño del Robledo, Corteconcepción, Fuenteheridos, Higuera de la Sierra, Linares de la Sierra, Los Marines, Valdelarco y Zufre.
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