El consejero de Hacienda, Industria y Energía, Juan Bravo, ha defendido ante el Pleno del Parlamento unas cuentas públicas para 2019 que reflejan “una inversión récord en políticas de sanidad, educación y dependencia”, como demuestra el hecho de que estos tres ámbitos concentran el 53% del gasto total, lo que “denota la vocación social del nuevo Gobierno andaluz”.
El consejero de Hacienda ha incidido en que este Presupuesto “establece un mayor control sobre la Administración instrumental de la Junta de Andalucía, aportando transparencia sobre sus cuentas y sus plantillas como primer paso para tomar decisiones en el futuro que permitan avanzar en la racionalización y optimización de su funcionamiento”, al tiempo que “remedia problemas endémicos, estableciendo un sistema más eficaz para la justificación de subvenciones”, recogiendo de esta manera las reclamaciones formuladas por la Cámara de Cuentas.
“Son los Presupuestos de la rebaja fiscal que afecta a todos los andaluces: desde familias numerosas a pymes y autónomos; y también lo son del esfuerzo más ambicioso en muchos años por extender la Renta Mínima como fórmula para evitar el desempleo crónico”, ha indicado Bravo, que ha recordado que la bajada de impuestos aprobada el pasado mes de abril pretende dinamizar la economía.
El consejero ha señalado que estas cuentas “hacen compatible la recuperación de los derechos de los empleados públicos con el rigor y el equilibrio del déficit”. En 2019 hay que reducir el déficit del 0,41% con el que se cerró en 2018 al 0,1%, lo que implica una disminución de ingresos de unos 480 millones de euros, si bien “la meta es lograr el equilibrio presupuestario en 2020 e iniciar una reducción en los ratios entre deuda y PIB”.
Además, como gesto hacia los corporaciones locales, las cuentas recogen un aumento del 2% de la Patrica, partida que llevaba congelada desde 2012, y que va destinada a mejorar la financiación de la administración más cercana, al tiempo que muestran un importante esfuerzo para realizar una gestión “más eficiente” de los fondos europeos y de los ingresos finalistas para reactivar la inversión en infraestructuras.
Los ingresos del Presupuesto de 2019 ascienden a 36.495,5 millones de euros, una subida de 1.736 millones de euros, un 5% más respecto al ejercicio anterior. El esfuerzo inversor de la Junta de Andalucía se eleva hasta los 3.701,3 millones, montante que representa el 11,5% del gasto no financiero total del Presupuesto para este ejercicio. La apuesta inversora del Gobierno andaluz para 2019 equivale al 2,2% del PIB de la comunidad autónoma y es la de mayor volumen en valores absolutos de los últimos 6 años.
“Estos son los Presupuestos de un Gobierno de PP y CS y nuestra obligación era reflejar la voluntad de cambio expresada por la sociedad andaluza con unas cuentas que deben actuar como un revulsivo para Andalucía”, con un planteamiento que se basa sobre el pilar de “una Administración moderna, eficaz y profesional, que impulse la actividad económica y sea el soporte del bienestar ciudadano, sin añadir obstáculos a las iniciativas personales y profesionales, ya sean trámites burocráticos o aumentos de la presión fiscal”, ha esgrimido el consejero.
Gasto por políticas
La política para Sanidad cuenta con una asignación de 10.410 millones de euros, acumulando así la mayor dotación de recursos (un 28,5%) y reflejando además el mayor crecimiento interanual en términos absolutos, con más de 758,1 millones de euros (un 7,9% de incremento). Uno de los principales retos del nuevo Gobierno es la mejora del sistema sanitario público, a través de la eficiencia en la gestión, la optimización de recursos y la mejora de las condiciones laborales de sus profesionales. “El trabajo de los próximos años va encaminado a la mejora de la calidad del servicio prestado a las personas usuarias, con una atención muy especial a la reducción de plazos y a la atracción de profesionales cualificados”, ha explicado Bravo.
“Habrá que hacer un plan de infraestructuras sanitarias para la próxima década”, ha apuntado Bravo, que ha enumerado entre las actuaciones que recoge este Presupuesto se encuentran la terminación y puesta en funcionamiento del Hospital Materno Infantil de Torrecárdenas, la ampliación del centro de salud Casa del Mar en Almería, la terminación del centro de salud de Camposoto en Cádiz, la reforma de los quirófanos de Puerto Real, la reforma en la UCI Pediátrica del Reina Sofía en Córdoba, la reforma y climatización del Hospital Virgen de las Nieves en Granada, la reforma integral del Hospital Ciudad de Jaén, del centro de Salud de San Pedro de Alcántara o la terminación del centro de salud de Coria del Río.
La política de Educación acumula el 20,6% del total del Presupuesto, con más de 7.508 millones de euros, lo que implica un incremento del 3,5%. Los recursos totales para el modelo de universidades crecen en 1.582 millones de euros, un 3,4% más. “Estamos ante el Presupuesto que eleva el Programa de Apoyo a las Familias más de un 10%, el de Educación especial en un 4%, el de Atención Socioeducativa de 0 a 3 años en un 8%, unido a una partida histórica para garantizar la gratuidad de los libros de texto y del programa de innovación y Evaluación Educativa, que crece un 35%”. Además, estas cuentas consolidan 3.800 plazas en Infantil y Primaria e incrementan los fondos para una gestión más ágil de las sustituciones. “Son los Presupuestos que preparan la implantación del Bachillerato Internacional y que invierten más de 60 millones de euros en la mejora de infraestructuras”, ha detallado.
La política en Conciliación, Igualdad y Familias crece un 5% y se sitúa en 2.424 millones de euros. De este importe, el programa de atención a la dependencia concentra más del 60% del gasto y crece más de un 7%. Mejoran las partidas para atención residencial (3,5% más), el servicio de ayuda a domicilio (10% más), el servicio de centro de día (4% más), las prestaciones económicas para el cuidado en el entorno del hogar (9,5% más). “Estos Presupuestos son los del Plan de Choque para lograr que el número de beneficiarios de los programas de dependencia rocen los 225.000 al final de este ejercicio”.
El consejero ha reseñado el “colapso” que existía en la gestión de los fondos en la Consejería de Empleo, de modo que ahora se hace “un esfuerzo muy especial en el gasto real de las partidas destinadas a Empleo, donde el anterior Gobierno ha devuelto 1.300 millones de euros por su incapacidad para gastarlos”. El nuevo Presupuesto cuenta con 1.053 millones de euros para estas políticas, entre los que destaca el apartado de Formación Profesional para el empleo, al que se destinan más de 241 millones. “El anterior Gobierno del PSOE decoró este Presupuesto con una cifra muy bonita, pero no llegó ni siquiera a ejecutar el 50%, devolvió al Estado fondos por 220 millones de euros solo en 2018 y en torno a 1.300 millones desde 2012. Si el nuevo Gobierno logra una ejecución alta del nuevo Presupuesto, nuestra apuesta será más de un 70% superior a la de nuestros antecesores”. Estas cuentas persiguen una redefinición del Servicio Andaluz de Empleo y contempla otras actuaciones como el pago pendiente a los Ayuntamientos por los planes de Empleo, la ampliación de los programas para la contratación de desempleados de larga duración y personas con discapacidad y nuevos incentivos para los nuevos autónomos, tras la finalización de la tarifa plana estatal.
Las actuaciones destinadas a Vivienda, Urbanismo y Ordenación del Territorio cuentan con una dotación de 317,7 millones de euros, un 16,4% más. Ahí se incluyen acciones para ayudar a inquilinos con ingresos limitados y a jóvenes, a personas en situación de emergencia social, ayudas a promotores de vivienda protegida en alquiler, ayudas para que nuevas promociones de viviendas se destinen al alquiler con rentas limitadas y actuaciones para la rehabilitación de espacios urbanos. “Estos son los Presupuestos en los que se inicia un impulso para fomentar el acceso a la vivienda entre los más jóvenes”.
Estas cuentas destinan, asimismo, 590 millones de euros para la dinamización económica e industrial, lo que implica un crecimiento del 26,7% con respecto al año anterior. Ponen el acento en la economía digital y en el apoyo a la transformación de comercio tradicional con mejores infraestructuras y con acceso a formación y nuevas tecnologías. Hay también un impulso decidido al cambio de modelo energético de particulares y empresas, que deben ser más eficientes tanto en sus hogares como en sus fórmulas de movilidad, en línea con “el esfuerzo por convertir a Andalucía en la mayor región productora de renovables de Europa”.
Los recursos destinados para actividades agrarias y pesqueras se sitúan para 2019 en 2.752,9 millones de euros. Estos Presupuestos mejoran los caminos rurales con una inversión de más de 60 millones; modernizan y mejoran los regadíos; facilitan la transición generacional en el campo gracias a la reforma fiscal y a la simplificación de trabas; plantean una gestión más eficaz de los fondos europeos para el desarrollo rural; y avanzan hacia el desarrollo de la economía circular.
La política de justicia, interior y protección civil cuenta con una dotación de 612 millones de euros, un 6,1%. Son los Presupuestos de la puesta en marcha de nuevos órganos judiciales en el Campo de Gibraltar, de una nueva sede judicial en Lebrija, de la modernización de infraestructuras judiciales y del cumplimento de los compromisos adquiridos con los profesionales para la mejora de la asistencia jurídica gratuita.
Una de las inversiones más importantes, por lo que implica para el futuro de Andalucía, es la política destinada al impulso de actividades de Investigación, Desarrollo e Innovación, que concentra unos recursos por importe de 491 millones de euros, lo que implica un alza del 4,4%, con un énfasis especial en la contratación de jóvenes investigadores en las universidades y en la conexión entre el mundo universitario y el tejido productivo.
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