El grupo alimentario Dcoop Sociedad Cooperativa Andaluza es una gran cooperativa alimentaria de las denominadas de segundo grado porque sus socios son empresas -en su mayor parte, cooperativas- que, a su vez, tienen como propietarios a 75.000 agricultores y ganaderos. En términos de producción, Dcoop es un auténtico gigante. Es, por ejemplo, el mayor productor oleícola del mundo y también es una empresa líder en producción de vino, además de operar en los sectores de suministros, ganadería, orujo, frutos secos y cereales. En 2023 ha superado los 1.400 millones de euros de facturación, la mitad en la exportación.
Su esquema de producción comienza cuando cada cooperativista entrega y transforma sus producciones agropecuarias en las numerosas almazaras, bodegas de vino, entamadoras o instalaciones ganaderas que poseen el grupo y sus entidades asociadas, para que Dcoop los comercialice una vez obtenidos, a granel, procesados o envasados.
La cooperativa posee varias fábricas y plantas de envasado de aceites, vino, frutos secos, leche de cabra, subproductos de olivar y aceitunas de mesa, y además participa como propietario en empresas que prestan otros servicios industriales y comerciales.
El Grupo Dcoop, la mayor cooperativa agroalimentaria andaluza, opera en España y exporta sus productos a decenas de países. Actualmente, cuenta con varios centros de trabajo propios y participados en Alcázar de San Juan (Ciudad Real); Villarrubia, Córdoba, Alcolea, Villa del Río y Monturque (Córdoba); Jaén, Martos y Guarromán (Jaén); Santa Fe (Granada); Dos Hermanas, Osuna y El Saucejo (Sevilla); y Antequera, Mollina, Málaga y Campillos (Málaga). Sus socios están radicados en Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, País Vasco, Extremadura, Comunidad Valenciana y Madrid.
Su compromiso alcanza también la investigación, en su mayor parte cofinanciados por la Junta de Andalucía y fondos europeos. En la actualidad, desarrolla numerosos proyectos en este ámbito, como Zoolive, para el diseño de aditivos en alimentación animal a partir de extractos bioactivos de la industria de la aceituna de mesa; Biorumioli, para la elaboración de productos bioeconómicos derivados a través de la revalorización de subproductos del aceite de oliva; o Coverolive, para el uso de nuevas tecnologías en la generación de cubiertas vegetales adaptadas para mejorar el suelo y biodiversidad del olivar.