Los usuarios y usuarias del taller de cerámica del centro ocupacional Javier Peña de Almería han tenido días atrás un encargo muy especial: han sido los responsables de elaborar uno de los obsequios que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha otorgado al Papa Francisco en el marco de su visita al Pontífice. El encargo fue recibido con "muchas ganas e ilusión", siendo conscientes de la importancia de una audiencia de esta envergadura.

Así, entre los obsequios otorgados, destaca el cáliz de cerámica que el centro ocupacional para personas con discapacidad intelectual, de titularidad de la Junta de Andalucía, ha realizado para la ocasión. Hasta tres modelos diferentes elaboraron los usuarios del taller de cerámica, formado por más de una decena de personas con discapacidad intelectual mayores de 18 años. Finalmente, el elegido fue uno muy sencillo, con el interior en tono verdoso, en referencia al color de la bandera andaluza, que está presente en su base.

Dos de los integrantes del centro Javier Peña, durante la elaboración del cáliz.

El Papa recibió todos los obsequios con entusiasmo, pero mostró especial interés por conocer la historia de este centro y la labor de sus usuarios, llegando a ver, incluso, una fotografía de toda la comunidad que forma parte del Javier Peña. El Papa quedó admirado por el buen resultado de la pieza cerámica y se mostró muy agradecido por el esfuerzo realizado.

El centro Javier Peña, referente en inclusión social, cuenta con un total de 52 plazas ocupadas y talleres de carpintería, juguetería y cerámica, entre otros programas, que permiten a estas personas formarse y adquirir conocimientos y habilidades. Lola García, directora del centro, ha asegurado que la noticia de que iban a hacer el cáliz fue recibida "con mucha alegría". Todos los usuarios y usuarias y los trabajadores están "muy contentos", ya que ha sido "todo un honor" elaborar el cáliz con el que se ha obsequiado al Papa. "Estamos todos como locos de contentos y felices".

No es el único encargo de relevancia que reciben los usuarios del Javier Peña, que trabajan en la elaboración de las estatuillas con las que se obsequia a los galardonados en los Premios Andalucía +Social de la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, entre otros.

Un integrante del centro Javier Peña introduce el cáliz de cerámica en el horno.

Centro ocupacional Javier Peña

El centro es el único de sus características en Andalucía. En marcha desde 1979, cuenta con 52 plazas ocupadas, pero quedan aún plazas disponibles en sus distintos talleres que, además de aprendizaje, ofrecen a sus usuarios un plus en su autoestima y autonomía personal.

Javier Peña es el nombre del arquitecto que lo diseñó y miembro de la familia que lo cedió para la atención a personas con discapacidad intelectual mayores de 18 años. Su objetivo es mejorar su calidad de vida, desde una atención integral y promoviendo su autonomía. En el centro se fabrican mobiliario de oficina, juguetes de madera y elementos decorativos de cerámica y otros materiales. Todo ello se destina a dotar de equipamiento a entidades públicas y privadas sin ánimo de lucro, que desarrollan su labor en el ámbito de los servicios sociales.

En el centro también se ofrece atención a personas con discapacidad a través de talleres cognitivos, enfocados en la formación de habilidades académicos funcionales (lectura, cálculo, manejo de nuevas tecnologías), habilidades aplicadas a la vida diaria, desarrollo de habilidades sociales, atención integral del envejecimiento prematuro, actividad física y de ocio y tiempo libre, aunque, destaca, especialmente, por su promoción orientada al ámbito laboral, para lo que cuenta con un programa de formación práctico-laboral en áreas como mantenimiento, limpieza, ordenanza, orientación laboral y prácticas en empresa.

Foto de familia del Centro de Día Ocupacional para Personas con Discapacidad Javier Peña.

Además, el centro 'Javier Peña' es muy conocido en Almería por su labor con la madera, ya que alberga talleres de ebanistería, carpintería y juguetería, además de disponer de una carpintería industrial. Por ello, reciben encargos de centros públicos y ayuntamientos con fines sociales.

En este centro ocupacional se trabajan las diferentes dimensiones de la calidad de vida de las personas, relacionadas con el bienestar emocional, las relaciones interpersonales, el bienestar material, el desarrollo y la autonomía personal, la inclusión social y los derechos, como la privacidad y el acceso a las libertades reconocidas, entre otros aspectos. Todo ello, en definitiva, para avanzar hacia un modelo de sociedad más justo e igualitario.

Cuenta con un total de 14 profesionales entre los que se encuentran los profesores que imparten las prácticas, dos de ellos especialistas en cerámica y tres en trabajos de madera, un  educador social, un terapeuta ocupacional, un psicólogo, un oficial de primera de oficios, un limpiador, un ordenanza y la directora del centro.